La Organización Mundial de la Salud (OMS) aprobó hoy el uso de emergencia de la vacuna anticovid de Sinovac, segunda de fabricación china que obtiene esta luz verde después de que a principios de mayo lo consiguiera la desarrollada por Sinopharm.
La vacuna Sinovac-CoronaVac «cumple los estándares internacionales de seguridad, eficacia y fabricación», señaló la OMS en un comunicado, donde señaló que sus asesores técnicos visitaron instalaciones del laboratorio pequinés antes de emitir su decisión.
Se trata del sexto fabricante que logra entrar en la lista de uso de emergencia, después de que antes lo consiguieran las vacunas de Pfizer (primera en hacerlo), Moderna, AstraZeneca, Johnson & Johnson y Sinopharm.
Sinopharm y Sinovac son además las primeras vacunas contra la COVID-19 a las que la OMS da esta luz verde sin que previamente hubiera una decisión similar por parte de la Agencia Europea del Medicamento (EMA) o la Administración de Fármacos y Alimentos de EEUU (FDA, en inglés).
La aprobación de uso de emergencia da a estas vacunas la posibilidad de entrar en el programa COVAX, creado por la OMS en cooperación con otras agencias para distribuir a bajo precio y de forma equitativa dosis de vacunas anticovid en todo el mundo.
La OMS destaca que Sinovac es una vacuna de virus inactivado, fácil de almacenar y transportar, y sus expertos recomiendan su uso en mayores de 18 años, a los que deben de administrarse dos dosis con un intervalo de entre dos y cuatro semanas.
Los estudios indican que la vacuna de Sinovac tiene una eficacia de sólo el 51 % en la reducción de casos sintomáticos de COVID-19, aunque el porcentaje se eleva al 100 % para casos graves y aquellos que requieren hospitalización.
Los asesores de la OMS advierten de que no hay datos sobre la eficacia de la vacuna en mayores de 60 años, ya que pocos sujetos por encima de esa edad participaron en los ensayos clínicos, aunque ello no les lleva a recomendar una edad máxima para usarla, puesto que en las campañas de vacunación sí se ha mostrado efectiva en personas mayores. EFE