El Concejo Cantonal aprobó el martes 15 de junio del 2021, en primer debate, una reforma a la Ordenanza de Erradicación de la Violencia con la que se dota de presupuesto a los programas para protección y atención de las víctimas por un monto aproximado de 500.000 dólares.
El concejal Cristian Zamora explicó que el plan para la aplicación de la ordenanza será tratado con los colectivos de defensa de los derechos de la mujer, que serán parte activa de la administración de los recursos a través de un fideicomiso.
La ordenanza plantea crear un fondo con recursos propios del Municipio sin imponer nuevas tasas de contribución. El dinero proviene de un aporte del 35 % de los impuestos que ya se pagan por concepto de terrenos no edificados o baldíos, que a su vez representan zonas inseguras para las mujeres.
Son cuatro los objetivos específicos que tiene la reforma a la ordenanza. El primero es la entrega de becas de apoyo y manutención a hijos de víctimas de femicidios hasta el bachillerato.
En este caso, no se esperará a la sentencia ejecutoriada contra el femicida para entregar la ayuda, sino que se asistirá de forma inmediata a los hijos de las víctimas, informó la concejala Paola Flores.
Otro de los objetivos tiene que ver con la salud mental, un tema “que no es tratado de manera adecuada y desemboca en violencia por desajustes mentales” comentó el concejal Zamora.
Los servicios de salud mental y apoyo psicológico se prestarán a las mujeres víctimas de violencia, a sus hijos y también “a los perpetradores” para darles la posibilidad de tratar sus problemas psicológicos y eliminar comportamientos violentos.
La Economía Violeta también es contemplada en la normativa, con el objetivo de que las mujeres víctimas de violencia tengan autonomía financiera. “Hay víctimas que no salen del círculo de agresión porque quedan desprotegidas económicamente. Estamos planteando emprendimiento y formación para lograrlo” explicó el concejal.
El último punto tiene que ver con la inversión en tecnología para que se generen aplicaciones que puedan emitir alertas desde el teléfono celular, con el objetivo de que seguridad, pública o privada, asista de forma inmediata a las víctimas.
El proyecto es apoyado por las Naciones Unidas y ONU Mujeres. Esta semana iniciará un proceso de socialización con la mesa de erradicación de violencia y colectivos ciudadanos para que den sus puntos de vista sobre la normativa. (I)