Jóvenes solos ante una covid-19 que causa estragos en la salud mental y cuyo escape muchas veces es el suicidio, en un país como Uruguay con cifras alarmantes, provoca la creación de Más Vida, la aplicación que busca dar respuesta y apoyo para prevenir esa trágica pandemia invisible.
La necesidad de dar apoyo a estos adolescentes que ven restringida su vida social, e incluso en muchas oportunidades son estigmatizados y tachados de irresponsables por su conducta ante la pandemia, hizo que la integrante de la Comisión Honoraria de Prevención contra el suicidio del departamento (provincia) de Canelones (sur), la psicóloga social Carla Manrique, ideara la aplicación.
Más Vida atraviesa su etapa final y ha sido desarrollada por un grupo de cinco personas (un estudiante de ingeniería, un programador, una diseñadora gráfica, un docente y Manrique) que, de manera honoraria, han llevado adelante este proyecto que esperan presentar el 17 de julio, cuando Uruguay conmemora el Día Nacional de Prevención del Suicidio.
«La idea de la aplicación surgió en mi casa hablando con mi hija de 17 años y ella me decía que la gente grande utiliza el teléfono fijo, pero que los jóvenes están todo el día con el celular y les gustan las aplicaciones», explica Manrique.
Según detalla, es la segunda causa de muerte de jóvenes de entre 15 y 29 años e incluso ha habido registros de suicidios en niños menores de 12 años.
Por eso, el desafío es captar a esta población para que tenga herramientas dinámicas donde ser escuchados. Entre todas las posibilidades con las que contará está la opción de un botón de pánico para comunicarse de manera inmediata con líneas de ayuda psicológica.
«Quisimos poner un chat de tiempo real con una persona porque creemos que esta temática no la tiene que contestar un mensaje automatizado. Queremos, más que nada por los jóvenes, que puedan usar los emoticonos que sabemos que les cuesta tanto decir cómo se sienten, reconocer emociones», apunta.
Además, tendrán un foro donde los participantes puedan crear una comunidad, trabajar juntos en cosas que los motiven a estar bien, compartir fotos, canciones, reflexiones, para que también se sientan identificados con la aplicación y no sea algo que utilicen una vez y luego descarten.
Aunque ya están en las etapas finales de desarrollo y el ministro de Salud Púbica, Daniel Salinas, les manifestó su respaldo, como también la intención de que la cartera absorba la propuesta, lo cierto es que hoy no cuentan con apoyo económico, por lo que tienen cuentas para colaborar con la iniciativa.
LA PANDEMIA SILENCIOSA
Según el último registro presentado por el Gobierno uruguayo en 2020, hubo 723 suicidios en 2019 y una tasa de 20.55 cada 100.000 habitantes (la más alta de la década), por lo que esta problemática es de las que despierta mayores preocupaciones a nivel nacional.
Del total de casos, 80 % son hombres, aunque en relación a los intentos de suicidio las mujeres son las que más cantidad registran.
«Estamos muy mal, en un podio que Uruguay no quiere estar compartiendo los primeros lugares en América con Cuba y Guyana. Tenemos una altísima tasa de mortalidad por suicidio», explica.
La «pandemia silenciosa», como la describe Manrique, debe ser tratada en mayor profundidad, ya que, según expresa, «nunca se le hincó el diente» y solo se pone sobre la mesa cuando pasa una tragedia vinculada a alguna figura pública, como la protagonizada en febrero pasado por el futbolista uruguayo Santiago ‘Morro’ García, que se quitó la vida siendo jugador del Godoy Cruz argentino y llevó esta problemática a la primera plana. EFE
