En inglés se llama hobby y está vinculado con múltiples tareas que nos permitan entender que los seres humanos podemos desplegar nuestras aptitudes por los más variados campos del quehacer por gusto e interés personal y no por obligación como puede suceder con el trabajo o el estudio cuando no existe una verdadera vocación que hasta generan diferencias etnoculturales entre japoneses, germanos y latinos. Los hobbies no tienen obligatoriamente que estar vinculados con la profesión o campo laboral de la persona, de esta manera puede constituirse en una puerta de escape y disfrute frente al estrés que se produce tan comúnmente en el ser humano citadino del siglo XXI e incrementado por la pandemia.
Los pasatiempos están relacionados con actividades que entretienen, gastan energía y disipan tensiones, así podemos entender la práctica de muchos deportes realizada no por obligación. En el mismo sentido encontramos a muchas formas de artesanía, juegos de ingenio, la más popular forma de cocina o gastronomía, el coleccionismo como la numismática, la filatelia, etc… En el mismo sentido podemos comentar de la jardinería y los huertos citadinos, espacios tan necesarios en el congestionado mundo del siglo en vigencia en razón de que nos permite distraernos, conseguir alimentos sanos y generar oxigenación en la turbulencia aérea de las ciudades modernas, así como el cultivo de una noble y antigua ciencia como es la Botánica, relacionando éste y otros pasatiempos con amigos, clubes y cultores en términos de realizar intercambio de experiencias, cultivar de mejor forma el hobby y hasta efectuar concursos.
Y qué decir del cuidado de mascotas, tarea tan popular en el mundo entero sí se considera que el número de canes es aproximadamente el 50% de la población mundial humana… No debemos detenernos frente a tanta posibilidad. (O)
