La pandemia de la covid-19 ha provocado que la esperanza de vida se reduzca en Estados Unidos un año y medio, con una pérdida de tres años en el caso de los latinos y de 2,9 años para los afroamericanos, según informó el Gobierno.
Los datos provisionales del Centro Nacional para Estadísticas de la Salud, parte de los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC), muestran la mayor disminución en la esperanza de vida de EE.UU. en un año desde 1943.
La expectativa promedio de vida para toda la población en el año pasado fue de 77,3 años, un nivel que no se registraba desde 2003.
En el caso de las mujeres bajó de de 81,4 años en 2019 a 80,2 años en 2020. Para los hombres, la esperanza de vida pasó de 76,3 en 2019 a 74,5 en 2020.
Quienes experimentaron la mayor caída en la esperanza de vida fueron los latinos, con una baja de 81,8 años a 78,8 años. Entre los hombres hispanos la expectativa de vida bajó de 79 a 75,3 años.
La expectativa de vida de los afroamericanos bajó de 74,7 a 71,8 años, y entre ellos la expectativa de vida de los hombres disminuyó de 71,3 a 68 años.
El informe señala que la covid-19 redujo al 90 % la esperanza de vida de los latinos; comparado con el 67,9 % en la reducción de expectativa de vida de los blancos, y el 59,3 % en la de los negros.
La causas principales de muertes siguen siendo las enfermedades cardíacas y el cáncer, pero fue la pandemia, que provocó la muerte de 385.201 personas en el país según los Centros de Control de Enfermedades, la que pesó en la reducción de la esperanza de vida.
Además, la pandemia provocó que aumentaran también los fallecimientos por otras razones.
Así, El año pasado 93.000 personas murieron por sobredosis de medicamentos, un fenómeno que se intensificó durante las cuarentenas, con 20.000 muertes más que en el año anterior.
Casi 70.000 de las muertes por sobredosis fueron el resultado de opioides naturales o sintéticos.
Los datos del gobierno también indican que las muertes por homicidio, diabetes y enfermedades del hígado -que son una señal de abuso de alcohol- aumentaron durante las cuarentenas y suspensiones de actividades por la pandemia.
El informe muestra que la tasa total de fertilidad -esto es el número de hijos que se espera que una mujer tenga – disminuyó el año pasado a 1,64, el nivel más bajo desde la década de 1930 cuando se comenzó a observar este indicador.
Además, los nacimientos disminuyeron sustancialmente en diciembre, cuando debían nacer los bebés concebidos en marzo y abril, una señal de que las parejas pueden haber postergado sus planes de procreación debido al inicio de la pandemia. EFE