Alexandra Escobar lloró amargamente tras no poder levantar, en tres intentos, los 95 kilogramos de su prueba en levantamiento de pesas. La halterista de 41 años llegó a Tokio como una de las cartas de Ecuador para buscar el podio olímpico, pero algo falló en el camino.
Empadada de sudor y con los nervios recorriendo su cuerpo, Escobar hizo su primer intento, pero no alcanzó a sostener las pesas sobre sus hombros. «Normalmente era difícil que falle en su primer intento», dice la comentarista del canal Marca Claro, que transmite la competencia.
Tras dos minutos de descanso, Escobar regresa al escenario donde se está jugando los que pueden ser sus últimos olímpicos. Repsira en reiteradas ocasiones, cierra los ojos y camina con dirección a las pesas. Desde los camerinos, la mirada de su entrenador y el equipo que la acompaña están fijos en ella.
Lo intenta nuevamente. Hace un esfuerzo, pero le cuesta y suelta las pesas al mismo tiempo que su rostro se llena de dolor. Llora, levanta las manos, mueve la cabeza. La presión le juega en contra.
Dos minutos más y llega el momento del tercer intento. María Alexandra Escobar tiene 30 segundos para seguir en competencia, para demostrar por qué llegó como una de las favoritas en esta división. Se inclina, toma impulso y, cuando parece que lo va a lograr, las pesas caen por detrás.
Escobar se queda unos segundos en cuclillas, cubriendo su rostro con las manos y se retira en medio de los aplausos de la gente que está en el lugar.
La esmeraldeña llegó a Japón con todas las intenciones de colgarse una medalla y retirarse. Pero tras lo ocurrido minutos antes, expresó: “No quiero retirarme de esta manera, así tan feo“.
«Eran mis últimos juegos olímpicos y quería cerrarlos con broche de oro, hacer una buena competencia, aunque no estuviera en el podio, pero hacer una buena competencia, esos cinco o seis intentos, y nada más”.
Alexandra Escobar
Haber fallado el primer intentó le jugó en contra a Escobar. «Cuando ya fallé el primero como que me descontrolé, me puse muy nerviosa, no me supe controlar», le dijo a Diario El Comercio.
Dijo que no fue una cuestión de lesiones, que antes de salir al escenario todo estaba bien. «Me bloqueé. Había entrenado duro, me presioné yo misma”, narró.
Escobar empezó a los 18 años en el levantamiento de pesas. Debutó en los de Atenas 2004, estuvo en los de Pekín 2008, repitió en Londres 2012 y en los de Río 2016. Tokio 2020 eran los Juegos en los que Alexandra Escobar aspiraba superar su mejor participación olímpica, la de Río, cuando alcanzó el cuarto puesto de la clasificación final.
En 20021, fue la campeona mundial del levantamiento de envión en Turquía. Quedó con bronce en el arranque y bronce en el total.
Es la deportista mujer que más lejos ha llegado en las participaciones olímpicas de Ecuador. (D)