La democracia suministra los medios más eficaces para verificar y controlar los abusos del poder; cuando está bien concebida y ejercida por personas honestas y de probada capacidad ética y moral, constituye el sistema gubernamental más aceptable para la época actual.
La tiranía a diferencia de la democracia y desde cualquier punto que se la mire, se distingue por la imposición de un pensamiento único.
La tiranía tiende generalmente, a someter a los demás a su voluntad, basada en la creencia impropia de un libre pensador, de que el tirano es poseedor de la verdad absoluta y que nadie lo puede contradecir.
En la actualidad la hemos visto en Venezuela, Nicaragua, lo vivimos en el Ecuador con el Capo Correa, pero la más reciente es lo que acaba de ocurrir en Cuba, donde el actual mandatario hace pocos días llamó a un enfrentamiento entre cubanos por la protesta en reclamo de libertades.
Un país democrático, exhibe con orgullo un grado de tolerancia que tampoco raya en la permisividad como ocurrió en Quito en octubre de 2019.
Quien es INTOLERANTE TIENE UNA MENTE PEQUEÑA, se cierra en el convencimiento de que su razón es la única razón; no admite expresiones en contra, por muy pacíficas que sean.
Un mandatario que posea un razonamiento democrático, tiene la obligación de buscar el bienestar de todos, no solamente de quienes comparten su criterio o visión. Un gobernante sensato y democrático nunca llamaría a enfrentamiento de pueblo con el pueblo, esta actitud demuestra manifestaciones de tiranía, el desconocimiento del pensamiento diverso.
Me produce una callada tristeza, el pensar que tuvimos un mandatario y algunos actores políticos que consideran que Cuba es el ejemplo de la democracia. Que Venezuela es el abanderado de la justicia social, que Nicaragua representa un triunfo para las aspiraciones populares. Me parece que existe escasez de razonamiento democrático en estos juicios de valor.
Construir democracia, es reconocer el pluralismo de opiniones y el derecho a la crítica social, ES MÁS QUE EJERCER EL DERECHO AL VOTO O GANAR UN PROCESO ELECTORAL; construir democracia es dialogar dentro de un marco de respeto mutuo y construir entre todos lo que es de todos. (O)