La nostalgia se convierte en una sibilina y asfixiante trampa en «Reminiscence», una ambiciosa película en la que Hugh Jackman sufre los problemas de refugiarse en un pasado idealizado para olvidar tanto el presente como el futuro.
«Vivir demasiado en el pasado no es probablemente algo muy saludable», aseguró en una entrevista con Efe.
«Reminiscence» llega este fin de semana a los cines españoles bajo el mando de Lisa Joy, que debuta como directora de una cinta tras haber triunfado con «Westworld» (cocreada junto a su esposo Jonathan Nolan, el hermano de Christopher Nolan).
Como en aquella serie, Joy emplea la ciencia-ficción en «Reminiscence» como excusa para hablar de temas actuales como la crisis climática, la memoria o la soledad en una película que presenta conexiones con títulos como «Minority Report» (2002) o «Inception» (2010).
Jackman da vida a Nick, que en un Miami inundado por la subida del nivel del mar y entregado completamente a la vida nocturna, tiene un negocio que permite a sus clientes recrear tecnológicamente sus mejores recuerdos para huir de un presente desesperanzado y deprimente.
Los dilemas para Nick comienzan cuando desaparece de su vida una misteriosa y cautivadora mujer llamada Mae (Rebecca Ferguson).
Thandiwe Newton, Cliff Curtis y Marina de Tavira redondean el elenco de esta sombría y turbia película que, con una trama cargada de metáforas, homenajea al cine negro con un detective obsesionado por hallar a su particular «femme fatale».
Pregunta.- ¿Por qué la nostalgia y mirar al pasado pueden ser algo atractivo y seductor?
Respuesta.- Creo que esta película es muy relevante con lo que está pasando hoy en día (por la pandemia). Me parece que mucha gente tiene problemas con la salud mental y otros asuntos, y también con el sentimiento de la pérdida: el tiempo perdido y habernos perdido eventos como graduaciones, bodas, lo que sea… El planeta entero ha pasado colectivamente por este difícil periodo.
Así que, si yo ofreciera a la gente la oportunidad de todos los días revivir literalmente los mejores recuerdos de sus vidas, creo que sería algo muy tentador. Yo me vería tentado a hacerlo, por supuesto. Pero como puedes ver en la película, vivir demasiado en el pasado no es probablemente algo muy saludable.
P.- ¿Hemos perdido la fe y la esperanza en el futuro? ¿Somos una sociedad muy pesimista?
R.- (Piensa unos momentos). Yo no soy una persona muy pesimista: soy una persona optimista. Pero creo que es un argumento bastante convincente pensar que las cosas son desoladoras en muchas áreas.
No hay duda de los retos que enfrentamos. El cambio climático y otros asuntos son muy desafiantes y van a requerir que asumamos un esfuerzo colectivo. Hay un sentimiento de agotamiento, percibo eso. Así que sí, la nostalgia es un lugar realmente cómodo en el que estar.
P.- Como en «Westworld», Lisa Joy usa la ciencia-ficción en «Reminiscence» para hacer un comentario social de nuestro mundo.
R.- Lisa vino a mí y me dijo que solo quería hablar de las ideas de la película y cómo la había escrito sin que yo hubiera leído el guion. Eso es algo inusual: normalmente lees el guion antes de reunirte con el director. Y cuando yo llevaba 20 páginas, después de haber tenido esa reunión con ella, ya sabía que iba a hacer esta película.
Ella te da ese aire de seguridad y conocimiento sobre la historia, sobre por qué quiere contarla y sobre qué quiere decir. Es la primera película de Lisa, pero ella ha estado haciendo esto (trabajando en el mundo audiovisual) durante mucho tiempo así que estoy emocionado por ver las películas que hará en el futuro.
Está en la cima de la industria y me parece, como decía antes, que es inteligente, segura de sí misma, abierta y muy creativa. Acogía las sugerencias de los actores. Es una gran jugadora de equipo y también una gran líder.
P.- ¿Cómo jugaron con los elementos «noir» en una película de ciencia-ficción como «Reminiscence»?
R.- Lisa entiende este género y tuvo el coraje y la habilidad de romperlo y de reconstruirlo de nuevo. Es posible que, en el principio de la película, sientas que estás en una cinta «noir», que es lo que yo pensaba. Pero de repente luego estás en un thriller de suspense, en una película romántica y también en una de acción.
En realidad, va en un montón de direcciones diferentes pero, al mismo tiempo, lo entrelaza todo de una manera hermosa y poética. Creo que esa poesía es lo que me encanta del género «noir», ese lenguaje desnudo. Por eso pienso que es una película con mucho control de sí misma.
Pero esto es una explicación muy de escuela de cine (risas). El público no tiene que preocuparse por esto y pueden verla solo por el disfrute de verla sabiendo que están en buenas manos. EFE