Cerca de tres meses, 11 equipos en el Azuay fueron parte del Torneo de Segunda Categoría, de esos solo cuatro se ganaron el derecho a representar a la provincia en los Play-offs del Ascenso Nacional, no obstante en la primera fase se eliminaron. Ante esto los entrenadores locales, Andrés Cabrera y Fernando Pérez coinciden que los proyectos deben continuar y esperar a que estos den resultados en un plazo no mayor a dos años.
El pasado fin de semana Estudiantes, Aviced FC, Cuenca FC y Gloria, cerraron sus series como locales, sin embargo esto nos bastó para clasificar a las siguiente etapa. Representantes de Bolívar, Esmeraldas, Cotopaxi y Santa Elena se llevaron el cupo para los dieciseisavos de final.
“Bolillo” Cabrera, entrenador cuencano de 29 años, menciona que el trabajo en Segunda Categoría es fuerte, más aún cuando se disputa esta nueva modalidad, que entró en vigencia desde esta temporada, en la que se define en una tabla general, dejando atrás los “zonales”.
En cuanto al nivel competitivo en el fútbol azuayo, Cabrera, comenta que se debería reestructurar la forma en que se juega el torneo provincial, es decir, elaborar un solo grupo entre los equipos participantes. Asimismo, recomienda que se retome la organización de los torneos juveniles, tomando en cuenta que en el ascenso se exige tres jugadores Sub-20 como titulares.
“Creo que de esa manera el torneo se jugaría de mejor manera, el roce sería más fuerte y se vería el verdadero nivel para jugar fuera de la provincia. Los proyectos deben continuar, los resultados se verán en uno o dos años, no son inmediatos… La inversión para esta temporada fue considerable, es por eso que el trabajo no se debe quedar ahí”, dice el joven profesional que dirigió Estrella Roja en el 2020.
Estos criterios también son compartidos por Fernando Pérez, entrenador de Cuenca FC, quien añade, que el trabajo para marcar diferencia en el jugador cuencano, se lo debe cumplir desde las formativas.
El estratega local, que va por su cuarto año comandando el banquillo técnico de este equipo, insiste que los procesos no deben estancarse, menos aun cuando la inversión y el apoyo dirigencial van de la mano.
“Creo que el tema emocional nos pasó factura en la serie, el tema físico y técnico se puede trabajar, pero lo psicológico ya viene desde su formación. La personalidad en el futbolista cuencano se debe cambiar, ya que cuando se juega fuera de la provincia, cuesta que se compita en igual condiciones”, explica Pérez, quien adelantó que en 15 días retomará nuevamente los trabajos con su plantel, pensando en el torneo del 2022. (IAA)(D)
