De acuerdo con la revista Rolling Stone, Rumours ha sido posicionado como el séptimo mejor álbum de la historia, pero, ¿qué hay detrás de una de las obras musicales más complejas y adelantadas a su tiempo?
Estrés, ira y dolor son los ejes transversales del undécimo disco del conjunto británico. Y es que, la mayoría de sus canciones poseen mensajes directos y significativos vinculados con las vidas personales de cada uno de los integrantes de Fleetwood Mac.
Transcurría febrero de 1976 y el quinteto se encontraba en la etapa final de su proyecto más ambicioso, un disco que mantenía la estética estilizada y compleja que caracterizaba a la banda, pero añadiendo tintes de pop con la aspiración de llegar a un elevado número de audiencia. Sin duda esto era un desafío, pero no mayor al que atravesaban en sus relaciones personales.
El bajista John McVie, quien estaba casado Christine McVie, teclista y cantante, se encontraba bordeando en una depresión debido a su divorcio, que había comenzado un romance con Curry Grant, ingeniero de luces de la banda. A su vez, la vocalista Stevie Nicks y el guitarrista Lindsey Buckingham, también pareja, no lograban conciliar sus diferencias artísticas y sentimentales. Adicionalmente, el baterista, Mick Fleetwood acababa de descubrir que su mujer, Jenny Boyd -hermana de Patty Boyd- (esposa del Beatle George Harrison) le estaba engañando con uno de sus mejores amigos.
Al momento de su grabación ya existía una clara disposición por mantenerse distantes entre los miembros, Christine y Stevie, al terminar las sesiones de grabación, descansaban en una propiedad cercana al estudio, mientras que Fleetwood, McVie y Buckingham partían rumbo a la ciudad. Las noches abarcaban cocaína y mujeres.
Rumours fue un disco nocturno en su totalidad, la banda comenzaba a grabar a partir de las dos de la mañana, en sesiones donde los altercados, el llanto y la ira se encontraban en cada cabina.
“Amarte no es lo correcto”, “si pudiera, quizá te daría mi mundo, pero cómo podría, si tú no quieres cogerlo” o “sigue tu camino”, era parte de la letra de Go your own way, escrita por Buckingham haciendo alusión a su relación con Stevie. Como respuesta a este golpe bajo Nicks compuso como replica el tema Dreams, donde da una contundente pero elegante respuesta a su pareja y compañero de banda con el verso “cuando la lluvia te limpie lo sabrás”.
Christine McVie compuso Don’t Stop pensando en su esposo John, al igual que Oh Daddy que estaba dedicada a Mick, el único padre del grupo en ese momento, que se encontraba cerca de divorciarse.
Los problemas logísticos también fueron una carga anímica para la agrupación, que invirtió más de un millón de dólares para finalizar el disco. El 4 de febrero de 1977 llegó a las tiendas y alcanzó el número uno de ventas el 21 de mayo del mismo año desplazando al hit de Eagles, Hotel California. A partir de ese momento el álbum se mantuvo en los primeros lugares de la lista Billboard 200 durante 31 semanas no consecutivas.
El sufrimiento en el que estaban sumidos todos los miembros de la banda les brindó recursos musicales vistos en muy pocas ocasiones. La pasión se plasma en la autenticidad sus letras, al igual que en sus arreglos cargados de líneas melódicas fuertemente sentimentales. Se puede considerar a Rumours un trabajo terapéutico realizado en colectivo que demuestra las problemáticas humanas, quizás es por esto que sigue sonando después de 44 años.
Una expresión musical de nuestra naturaleza…