El subsecretario de la Oficina de Asuntos del Hemisferio Occidental del Departamento de Estado, Brian A. Nichols, dijo este lunes que la visita que el secretario de Estado, Antony Blinken, hará entre mañana y el jueves a Ecuador y Colombia envía una «clara señal» de apoyo a esos países.
En una llamada telefónica con periodistas antes del periplo del jefe de la diplomacia estadounidense, Nichols destacó la importancia de la relación con Quito y Bogotá, y se refirió a los valores que comparten, entre ellos la «democracia», así como el reto que supone para la región los flujos migratorios desde Venezuela y Haití.
«La visita del secretario a Colombia y Ecuador envía una clara señal de que apoyamos democracias vibrantes e inclusivas que respetan los derechos de sus ciudadanos», afirmó el funcionario que acompañará al secretario de Estado en este viaje, el tercero de Blinken a Latinoamérica después de sus visitas a Costa Rica y México.
Nichols confirmó que Blinken se reunirá este martes en Quito con el presidente de Ecuador, Guillermo Lasso, y con su ministro de Asuntos Exteriores, Mauricio Montalvo.
Un día después ofrecerá un discurso sobre «los desafíos que encara la región» y participará en un encuentro con empresarios ecuatorianos para destacar las oportunidades de colaboración con pequeñas y medianas empresas, incluidas las mujeres emprendedoras.
El miércoles, Blinken se desplazará a Bogotá, donde tiene previsto reunirse con el presidente, Iván Duque, y con la ministra de Asuntos Exteriores, Marta Lucía Ramírez.
Además, copresidirá el jueves una reunión ministerial para abordar la migración regional, que, según Nichols, tendrá como «foco sustancial» los dos flujos migratorios más grandes en el continente, el venezolano y al haitiano.
También el secretario de Estado participará en el Diálogo de Alto Nivel Estados Unidos-Colombia, donde sostendrá una conversación sobre democracia y derechos humanos con líderes juveniles, y asistirá a un acto sobre la crisis climática.
Consultado sobre Venezuela, Nichols se refirió a la decisión de Caracas de interrumpir el diálogo con la oposición venezolana a raíz de la extradición a territorio estadounidense del colombovenezolano Alex Saab.
El funcionario llamó al Gobierno de Nicolás Maduro a volver a la mesa de diálogo con la oposición venezolana en México y demostrar así su interés de forjar un futuro mejor para su pueblo.
«Si el régimen de Maduro se tomara más en serio sus preocupaciones declaradas sobre el pueblo venezolano, en realidad se sentarían con sus compatriotas y trabajarían para encontrar soluciones», afirmó el encargado para Latinoamérica en el Departamento de Estado.
«Y si avanzan en ese sentido -agregó-. Estados Unidos, les dará la bienvenida».
Nichols señaló que la Administración de Maduro coloca «sus propios intereses» o quizás los de «una persona» por encima de los del pueblo venezolano.
Defendió que las conversaciones en México deben conducir «a la restauración pacífica de la democracia», al fin de los abusos de los derechos humanos y a aliviar la grave crisis humanitaria en Venezuela.
El funcionario se pronunció así después de que el portavoz del Departamento de Estado, Ned Price, criticara el anuncio del Gobierno venezolano de no acudir a la mesa en México.
La cuarta sesión de las conversaciones debía comenzar este domingo, 17 de octubre, en la capital mexicana.
Saab tuvo este lunes su primera audiencia en un tribunal del sur de Florida (EE.UU.), donde es acusado de siete cargos de lavado de dinero y uno de conspiración para cometer ese delito.
El empresario colombiano fue detenido el 12 de junio de 2020 en Cabo Verde en virtud de una orden de captura emitida a través de Interpol por EE.UU. y fue extraditado el sábado al país norteamericano. EFE
