Estados Unidos destruyó 80 aviones de las fuerzas aéreas afganas en el aeropuerto militar de Kabul antes de retirarse por completo de Afganistán, el pasado agosto, reveló la Inspección General Especial de Estados Unidos para la Reconstrucción de Afganistán (SIGAR).
«Las fuerzas de EE.UU. incapacitaron todos los aviones de las antiguas Fuerzas Aéreas afganas (AAF, en inglés) y del Ala de Misión Especial (SMW) que quedaban en el Aeropuerto Internacional Hamid Karzai», dijo el órgano dependiente del Congreso de Estados Unidos en su primer informe trimestral tras la captura de Kabul por los talibanes, el pasado 15 de agosto.
En total, las fuerzas estadounidenses inutilizaron 80 aviones y 70 vehículos blindados.
A fecha de 31 de julio, las fuerzas aéreas afganas disponían de 131 aeronaves operativas, entre ellas 23 aviones de ataque A-29 Super Tucano.
El SIGAR afirmó que, antes de que las fuerzas afganas colapsasen ante el rápido avance de los fundamentalistas, pilotos militares afganos trasladaron cerca de un 25 % de todos los aviones a los países vecinos de Uzbekistán y Tayikistán.
Los posibles errores de cálculo en la retirada estadounidense de Afganistán a finales de agosto desataron el temor a que miles de millones de dólares en equipamiento militar hubiesen caído en manos de los talibanes, desde helicópteros Black Hawk hasta fusiles de asalto M-16, pasando por un A-29.
Las fuerzas afganas, formadas por unos 350.000 miembros del Ejército y la Policía entre otros cuerpos creados en las últimas dos décadas tras la invasión estadounidense, se desintegraron en cuestión de semanas tras el inicio de la retirada final de EE.UU. y los países de la OTAN.
Los talibanes capturaron Kabul, tras la huida del depuesto presidente, Ashraf Ghani, a Emiratos Árabes Unidos, el pasado 15 de agosto cuando las fuerzas de EE.UU. todavía estaban presentes en el aeropuerto de Kabul y el último soldado estadounidense abandonó el país el 30 de agosto.
Desde que los talibanes se hicieron con el poder, el país se ha sumido en una crisis económica y humanitaria, ante la que los fundamentalistas han pedido a la comunidad internacional que libere los casi 10.000 millones de dólares de fondos para Afganistán bloqueados y se retome la ayuda.
El pasado día 25, un informe de Naciones Unidas advirtió que cerca de 23 millones de afganos, más de la mitad de la población, se enfrentarán a partir de noviembre a una de las peores crisis alimentarias del mundo. EFE