A dos años de vivir la crisis social y política más grave de las últimas tres décadas, Chile enfrenta su proceso electoral más relevante del siglo XXI, en medio de un proceso constituyente que para muchos expertos culminará la transición iniciada tras el fin de la dictadura militar en 1990.
Al oeste, con la cadena montañosa de Los Andes como muro natural, Chile limita con Argentina, con el que mantiene buenas relaciones, aunque durante el último tiempo marcadas por discrepancias en torno a la soberanía de los mares australes.
Al norte, pasando el desierto y el altiplano, Chile comparte frontera con Perú y Bolivia, con el que mantiene congeladas las relaciones diplomáticas desde 1978 por la demanda boliviana de acceso al mar, territorio que perdió en la Guerra del Pacífico a fines del siglo XIX.
Chile es uno de los países más largos del mundo: su angosta franja se extiende entre el Océano Pacífico y la imponente Codillera de Los Andes por más de 4.300 kilómetros.
Su territorio, dividido en 16 regiones y habitado por más de 19 millones de personas, tiene climas variados y una rica biodiversidad.
Santiago, su capital, se ubica en el centro, es habitada por más de siete millones de personas y alberga La Moneda (sede presidencial) y el Poder Judicial. El Congreso Nacional, en cambio, se sitúa a 122 kilómetros de Santiago, en la ciudad costera de Valparaíso.
En Chile, habitan diez pueblos indígenas que hoy, por primera vez en la historia, participan en la redacción del nuevo texto constitucional: Aymara, Rapa Nui, Quechua, Diaguita, Atacameño, Chango, Colla, Kawashkar, Yagán y Mapuche.
El pueblo mapuche es el más numeroso y a la fecha mantiene un conflicto político con el Estado para recuperar las tierras que habitaron durante siglos y que hoy son propiedad de grandes empresas forestales.
RÉGIMEN POLÍTICO
Chile es una república presidencialista que desde el fin de la dictadura militar ha sido gobernado por un duopolio de coaliciones políticas: la Concertación (centro izquierda) y la Alianza por Chile (derecha).
La izquierda, aislada desde la dictadura, se rearticuló anclada en partidos tradicionales como el Comunista y sobre todo en las movilizaciones sociales donde se acumuló fuerza desde 2006 en adelante, con la revolución estudiantil como semillero de dirigentes actuales, incluido un candidato presidencial.
Los colectivos que buscan llegar a la primera magistratura para el periodo 2022-2026 son los derechistas de Chile Podemos Más (Sebastián Sichel), la izquierda con Apruebo Dignidad (Gabriel Boric), el centro con Nuevo Pacto Social (Yasna Provoste), el Partido Progresista (Marco Enríquez-Ominami), la ultraderecha con el Frente Social Cristiano (José Antonio Kast), la Unión Patriótica de ultraizquierda (Eduardo Artés) y el independiente Franco Parisi, que no está en el país.
A las generales del 21 de noviembre pueden acudir cerca de 15 millones de personas a votar por un presidente, así como por diputados y senadores que ocuparán escaños en el Congreso.
200 AÑOS DE INDEPENDENCIA
Chile instala su Primera Junta de Gobierno el 18 de septiembre de 1810 y, luego de una campaña político-militar contra la corona española, proclamada su independencia el 12 de febrero de 1818.
Entre 1879 y 1883, Chile se enfrenta en guerra contra la Confederación Perú-Bolivia impulsados por choques entre las élites de ambos países, hito donde Chile se hace de las tierras del norte y deja a Bolivia sin acceso al Pacífico.
En 1891, el país fue sacudido por una guerra civil que termina con el parlamentarismo y consolida el poder de los núcleos conservadores por sobre los liberales, mientras en el seno de la población germinaba un incipiente movimiento obrero desde las salitreras al norte del país.
Salvador Allende Gossens, militante socialista, se transformó en el primer marxista electo democráticamente como presidente en las elecciones de 1970, iniciando un proceso conocido internacionalmente como la «vía chilena al socialismo».
El proyecto allendista fue truncado ferozmente por la derecha chilena a través de un golpe militar impulsado por todas las ramas de las Fuerzas Armadas, apoyadas por la Agencia Central de Inteligencia (CIA) de Estados Unidos.
En adelante, Chile sufrió una dictadura de 17 años donde fueron asesinados y/o desaparecidos más de 3.000 opositores políticos y militantes de izquierda, con cientos de miles de torturados y vejados en cárceles secretas y centros de tormentos.
La dictadura cívico-militar, que contó con el apoyo de la derecha chilena, terminó en 1990 tras un plebiscito impulsado por protestas que se extendieron desde 1983 a 1989.
Patricio Aylwin, político democristiano, fue el primer presidente en asumir la transición a la democracia, iniciando un periodo de gobiernos de la Concertación que duraría hasta el primer mandato del actual jefe de Estado Sebastián Piñera en 2010.
EL ESTALLIDO de 2019
Pese a mostrarse como uno de los países más estables de la región latinoamericana, Chile era según algunos expertos una verdadera «olla a presión»: la desigualdad y la impunidad de la élite empresarial y política involucrada en múltiples casos de corrupción y abuso generaron un malestar que estalló en protestas en octubre de 2019.
El chispazo fue el alza de los boletos de transporte y el resultado fueron oleadas de masivas manifestaciones a lo largo de todo el país desde el 18 de octubre, hechos que terminaron con una treintena de muertos, cientos de mutilados oculares en manos de agentes del Estado y miles de heridos.
La salida institucional ofrecida por los partidos políticos, haciéndose eco de las demandas más sentidas de los manifestantes -donde las mujeres jugaron un rol protagónico con concentraciones de más de 2 millones de personas- fue la Convención Constitucional, organismo encargado de redactar la nueva Carta Fundamental que reemplazará la vigente heredada de la dictadura.
La Convención Constitucional inició sus funciones el pasado 4 de julio y está compuesta por 155 delegados, entre ellos 17 representantes indígenas de todos los pueblos originarios.
OTROS DATOS
De acuerdo al Banco Mundial, Chile tiene un producto interno bruto (PIB) estimado en 279.000 millones de dólares, un PIB per capita que al 2025 se proyecta sobre los 30.000 dólares según el Fondo Monetario Internacional (FMI) y una inflación que al cierre de este año podría llegar al 5,7 % según el Banco Central.
La moneda es el peso, que cotiza a unos 800 unidades por dólar estadounidense.
Chile es el primer productor mundial de cobre y en 2020 la producción del metal rojo alcanzó a 5,77 millones de toneladas. Además, posee más de la mitad de las reservas de litio del planeta, mineral clave para la transición energética impulsada en los países desarrollados.
Asimismo, exporta pescado, celulosa, vino y frutas a los mercados más importantes del mundo, como Europa, China y Estados Unidos.
El impacto de la crisis derivada de la pandemia hizo caer la economía chilena un 5,8 % en 2020, la peor cifra en cuatro décadas. EFE