Las fiestas de Fin de Año están revestidas de felicidad, unidad, paz, alegría, pero también de excesos. Diciembre es un mes de novenas, reuniones, cenas. Son semanas de consumir de todo sin empacho. Los dulces, las grasas, carbohidratos, bebidas alcohólicas y las malas noches es algo común durante este tiempo, por lo que llegado enero resulta conveniente volver a los hábitos de siempre, pero sobre todo de configurar un sencillo y efectivo plan para desintoxicar el organismo, ponernos en forma de nuevo y perder esas libras ganadas en Navidad y Fin de Año.
Aquí una serie de consejos de portales especializados en el tema, como Funda Hígado América, Vaĺida y Dietox, para ponernos a plenitud y empezar con energía y vitalidad el 2022.
1- Desintoxicar el hígado
El hígado es uno de los órganos que mayor maltrato recibe durante este tiempo de fiestas y excesos. El vino, la cerveza, el licor, las grasas inevitablemente son parte de estas celebraciones, por lo que una de las tareas de la primera semana de enero puede ser desintoxicar nuestro hígado y aliviarlo después de un trajín de varios días.
De acuerdo a Funda Hígado América, hay algunas formas de hacerlo:
Café y té verde
Según el portal especializado en temas inherentes a este órgano del cuerpo humano, el consumo regular de café y té negro supone menos riesgos de sufrir enfermedades hepáticas crónicas y de hígado graso. Asimismo son antioxidantes y reducen la acumulación de grasa.
Jugo de uva
El jugo de uva es un gran alimento para reducir el colesterol, desintoxicar el organismo y mantener un peso saludable. Este zumo tiene altos niveles de vitamina C, hierro, ácido fólico, potasio y calcio. “Tiene antioxidantes que el cuerpo convierte en vitamina A y gracias a ello ayuda a reducir la inflamación y a prevenir el daño hepático”, señala el referido portal.
Jugo de remolacha
El betabel o la remolacha se encuentran entre los mejores vegetales para pacientes con enfermedades hepáticas, por lo que resulta clave para limpiar el hígado.
Este alimento tiene antioxidantes como la betalaína, lo que disminuye la inflamación y protege el corazón. Asimismo contiene vitamina C y potasio.
2- Dieta balanceada
Una dieta rica en agua, frutas y verduras es de igual manera una buena forma de desintoxicar el organismo y perder unas cuantas libras después del intenso mes de diciembre.
Los expertos recomiendan beber de 8 a 10 vasos por día, poco a poco, durante la mañana, tarde y noche. Beber al menos dos vasos en ayunas ayudará a limpiar el organismo con mayor rapidez.
También es importante incluir, al menos por la primera semana, frutas cítricas y con vitamina C como la naranja, el limón, la mandarina, la toronja. El zumo de naranja y de limón son muy buenos para desintoxicar.
Verduras como la acelga, la espinaca, el brócoli, la lechuga, la cebolla, el tomate ayudarán sobremanera a limpiar el organismo.
Al menos por estos días es clave evitar las grasas saturadas y los dulces como salchipapas, hamburguesas, carnes fritas, helados y tortas.
3- Ejercicio
El ejercicio es literalmente vital para ponerse en forma. Si se ha consumido licor en exceso el día anterior, es mejor esperar hasta el día siguiente para empezar con las rutinas.
Si no ha hecho ejercicio hace varias semanas o desde hace mucho tiempo es preciso empezar con cargas bajas, es decir, por ejemplo caminar o trotar máximo 25 minutos durante la primera semana e incrementar el tiempo progresivamente.
La segunda semana la carga puede incrementarse a 35 minutos, y así sucesivamente.
La bicicleta y nadar también son muy buenas formas de ejercitarse.
Es importante tener la observancia de calentar al menos 15 minutos antes de empezar con la rutina.
4- Dormir bien
Diciembre es un mes en el que no se duerme como generalmente se duerme en el curso del año. Y sobre todo en los últimos 10 días que se celebra Navidad y Fin de Año. El cuerpo queda disminuido, agotado, por lo que dormir bien, al menos de 7 a 8 horas, resultará clave para recuperar la energía y ponernos de nuevo en forma.
Por ello se podría planificar unas noches tranquilas, con una cena ligera al menos tres horas antes de acostarse, crear un ambiente sereno, dejar el celular lo más lejos posible y reparar en que no haya ninguna entrada de luz que impida conciliar el sueño.
Dormir esta cantidad de horas es determinante para recuperar efectivamente toda la capacidad de nuestra mente y pasar las horas del día con lucidez y energía.
