Peticiones de renuncias hasta calificativos un poco subidos de tono en contra de la dirigencia, empezaron a ser comunes entre algunos aficionados del Deportivo Cuenca, sobre todo por redes sociales, después de la pérdida de visitante frente a Guayaquil City por no presentar el número mínimo de jugadores reglamentario.
El hecho ha dejado en mal predicamento la institucionalidad del club y ha hecho que en algunos sectores se empiece nuevamente a conversar sobre un campeonato con 12 clubes, como se competía hasta antes de la creación de la LigaPro, en 2019. Se piensa que hay clubes que no se pueden sostener económicamente en la máxima categoría del balompié ecuatoriano.
El Expreso Austral tenía 10 futbolistas habilitados, pero tres no estaban en condiciones de jugar por contractura muscular (Lucas Mancinelli), conjuntivitis viral (Jesi Godoy) y positivo de COVID-19 (Eduardo Jiménez).
¿Qué pasó con el proceso de habilitación?
Según Villavicencio, el error estuvo en confiar en la palabra de quienes estaban en el Departamento Financiero. Dice que siempre recibieron la respuesta que el proceso de habilitación estaba bien encaminado, sin embargo, el tiempo les quedó corto cuando fueron notificados que faltaban algunos documentos.
La derrota
En la cancha, al promediar la media hora de juego, ya cuando el Equipo Ciudadano ganaba 2-0, John Mero se sumó a las bajas. El arquero morlaco inexplicablemente se lesionó y, ante el aviso de que no puede seguir, el central dio por terminada la competencia. Por reglamento, el equipo de Pool Gavilánez se adjudicó un triunfo por 3-0.
«Solidarizarme con la gente del Deportivo Cuenca y felicitarlo por el espíritu deportivo que mostraron hoy, no es fácil, no sé qué hubiese hecho en el caso de ellos, pero estar acá y presentarse es loable, espero que las cosas se resuelvan», dijo postpartido el estratega guayaquileño.
¿Qué documentos faltaron para la habilitación de jugadores?
¿Hay trabajo conjunto en el directorio?
La presidenta del conjunto morlaco volvió a insistir que el club necesita personas que sean propositivas y añadió que dentro del mismo directorio hay desinterés de algunos miembros, pero que no puede hablar por terceros porque tendrán sus motivos para hacerlo.
Antecedentes
Fue el tercer bochorno deportivo que completa la actual directiva desde que ganó las elecciones el pasado 24 de septiembre de 2020, si bien fue posesionada el 14 de octubre de 2020 para un periodo de cuatro años (2024).
El primer hecho engorroso se dio el primero de octubre de 2020 cuando el club fue notificado de parte de la Federación Ecuatoriana de Fútbol que no podrá jugar frente a Olmedo, en la última fecha de la primera etapa, porque no logró arreglar la deuda con los acreedores.
El 17 de noviembre de 2020, Villavicencio culpó de la pérdida de puntos a Gabriel Castro y anunció que dicho empresario cuencano no será parte del Grupo Inversor. “La ruptura nace de una suspensión desde el partido ante Olmedo porque lo perdimos en la mesa, cuando yo le solicité el pago no lo realizó…”, resaltó en rueda de prensa y precisó que la deuda a cumplir era de 5.000 dólares.
Gabriel Castro una vez más llamó a la hinchada a exigir claridad sobre el convenio que se firmó con el Grupo Inversor.
El segundo bochorno fue en 2021. La inestabilidad económica tuvo un fuerte impacto en la estructura del plantel que conllevó a que el club no cumpla el objetivo que se trazó en principio de año y “celebre” la salvación de categoría como en 2020.
