El levantamiento de pesas es una de las disciplinas que aún aguarda mayor apoyo de parte de las autoridades de la Federación Deportiva del Azuay (FDA).
Por ahora el esfuerzo de los padres de familia y de los entrenadores les mantiene motivados en busca de alcanzar el nivel que les acerque a cumplir su sueño olímpico.
Martín Lata es de los nuevos prospectos de la halterofilia azuaya. Hace poco se presentó en el Control Técnico Nacional, que se llevó a cabo en Guayaquil, y dominó la división de -55 kg en la categoría U15.
“Pensé que no iba a ganar ya que no había dado el 100 % aún, pero bueno estoy feliz de irme a Puerto Rico”, señala.
El halterista cuencano se refiere al Campeonato Panamericano que se dará en la ciudad de San Juan, del dos al nueve de abril.
La Federación Ecuatoriana de Levantamiento de Pesas consideró su nombre en la Preselección Nacional. A sus 14 años tendrá su primera experiencia internacional. “Hay poco de nervios”, confiesa.
El estudiante de la Unidad Educativa Técnico Salesiano empezó en el deporte por recomendación de su tío Álvaro Mejía que entrenaba voleibol sala en la FDA.
“Me dijo que el levantamiento de pesas era gratuito y como tampoco hacía nada en la casa, me fui a entrenar”.
En el trayecto hubo altas y bajas hasta que se fue adaptando a las exigencias sin que repercutan en sus estudios.
“Me empezó a gustar más el deporte desde que me fui a Manabí y gané mis primeras medallas de oro en 61 kg, categoría Menores”. El tiempo ha volado. Ya lleva cuatro años levantando pesas.
Los trabajos de fuerza, para desarrollar su masa muscular, no faltan en la planificación que le traza el profesor Marco Culcay.
Lata recuerda que incursionó al deporte con 37 kg de peso corporal. Hoy hace un poco de dieta para bajar casi dos kilos y estar apto para competir en 55 kg.
Los entrenamientos exigen del deportista bastante disciplina y constancia. Hoy levanta 79 kg en arranque y 100 kg en envión. El objetivo es llegar a levantar 85 y 105 kg, respectivamente.
“A veces duele demasiado el cuerpo porque hacemos demasiada fuerza”, indica Lata y añade que para recuperarse acude al hielo y masaje.
El consumo de suplementos también es importante para una mejor preparación y recuperación, sin embargo, los azuayos al no tener apoyo de su federación recurren al bolsillo de sus padres y a la buena voluntad de su entrenador, quien incluso les provee de indumentaria.
Es que Culcay les entiende muy bien porque fue deportista. La vestimenta y calzado que ya no utiliza se las lleva a sus dirigidos para que se mantengan motivados y no abandonen el deporte.
“Ahora estoy participando, estoy entrenando con los zapatos que me entregó el profesor”, confiesa Martín. El calzado tiene rasgos especiales para una mejor estabilidad del deportista sobre la plataforma. Su costo oscila entre los 130 a 200 dólares.
Pese a las limitaciones e incluso a algunos tabús que hay en torno al levantamiento de pesas, Lata asegura que hay que encarar la vida con mentalidad positiva. Es lo que admira de su compañero de entrenamiento Iván Escudero, a quien le guarda un profundo respeto y admiración. (BST)-(D)
