Con globos, banderas, carteles, flores, aplausos y abrazos fueron recibidos los 248 ecuatorianos que salieron desde Ucrania tras el conflicto con Rusia, y que llegaron alrededor de las 11:00 al Aeropuerto Internacional Mariscal Sucre, en Tababela, Quito.
Tras descender de un bus que los trasladó hasta el lugar donde estaban los familiares, los gritos de emoción no se hicieron esperar.
Abrazos, llantos, alegría. Unos corrían para alcanzar a los suyos que bajaban más atrás.
Un perro que acompañó a uno de los viajeros también bajó del bus.
Y es que los viajeros que accedieron a este vuelo humanitario desde Varsovia, Polonia, llegaron ahí después de tomar varias rutas en su huida del conflicto que se vive en Ucrania. El avión hizo escala en Madrid hasta llegar a Quito.
Los pasajeros se sometieron a procesos de revisión que, según la Cancillería, fueron más ágiles tomando en cuenta que llegan en calidad de vuelo humanitario; además, pasaron los controles normales de migración y les hicieron la prueba de antígenos.
Bianca Carrera esperaba a su hijo Ernesto Gavilanes y compartió su emoción de pronto tenerlo en casa tras pasar por momentos “muy difíciles” por la travesía que él vivió hasta salir de Ucrania.
Ernesto estaba en Vínnytsia, a dos horas de Kiev, y le fue imposible llegar a la frontera con Polonia porque no tuvo cabida en los trenes, viajó a Hungría y tomaron el vuelo humanitario. Él se fue a Ucrania motivado por la permanencia de su hermana que estudia Medicina, “por ahora estaba aprendiendo el idioma. Se fueron con la idea de graduarse allá y ver otros horizontes”, comentó su mamá.
Carrera dijo que ahora su prioridad es llegar a casa con su hijo, hacer que se recupere de todo lo que estaban pasando allá.
Protección a animales
En el aeropuerto está presente personal del Programa Animal Ecuador, PAE, que según Shady Heredia, miembro de la fundación, fueron llamados para apoyar con la creación de un protocolo que establezca las mejores condiciones para trasladar a los animales que llegan en estos vuelos.
Detalló que, si las condiciones de los aviones y de los pasajeros no están garantizadas, tendrían muchos problemas, por lo que apoyan con criterios técnicos para que los traslados de los animales se den de forma ordenada y segura.
Heredia detalló que están en contacto con organizaciones internacionales para que puedan ayudar en los procesos de traslados y asegurar que en caso de que algún animal tenga que quedarse, lo hagan en lugares seguros para que no queden a la deriva.
El canciller Juan Carlos Holguín anunció que alrededor de las 12:00, hora de Ecuador, despegó desde Madrid el segundo vuelo humanitario, “aterrizará en Varsovia, donde recogerá a más ecuatorianos que salen de la guerra”, publicó en su cuenta de Twitter.
