La actual Rusia de Putin, se comporta en su vida diaria especialmente en sus polos de desarrollo de Moscu o San Petesburgo, con una construcción al estilo capitalista, que en su desenvolvimiento gozaban de libertad de opinión, ahora restringida en tiempos de conflagración al extremo de encarcelar por 15 años a quienes se refieran a la irrupción a Ucrania, como una guerra declarada, quedando nostalgias aparentes del orden comunista, en los ciudadanos de mayor edad que recuerdan algunos logros de aquel estado totalitario, como la atención a la salud, la educación gratuita o la vivienda. Pero los negocios a gran, mediana y pequeña escala dentro y fuera del país desde la participación privada está en auge, contando en la lista de algunos potentados rusos, dueños de empresas gigantes en el contexto internacional.
Repudiamos la guerra en cualquier parte del universo, cuando terminan los argumentos y debemos resolver los problemas a la fuerza. Mientras convalecemos de la pandemia nos encontramos con otro macabro acontecimiento que no da tregua al desarrollo. Es de anhelar que los dispositivos de las naciones unidas, sofoquen las disputas destructivas de las armas, que termine con los enfrentamientos y se sienten bases para la convivencia definitiva y la tolerancia. El mundo está a prueba y todos pendientes que la destrucción humana alguna vez termine. Estando convencido que el pueblo ruso de base, con historia y cultura milenaria también anhela la paz.
El mundo al borde de su descalabro, en tiempos de comunicación masiva y al instante, no se ponen de acuerdo los intereses en disputa de las potencias militares, que atacan a estados débiles para consolidar su hegemonía geopolítica, como la invasión a Ucrania, además las afectaciones económicas y sociales son cuantiosas, con una extensión de la pobreza masificada en los estados marginales del orbe, aunque se repite en los foros la consigna sin ser tomada en cuenta, que evitando las guerras y sus costos invirtiendo en servicios de la población depauperada en el mundo, se solucionaría el problema del hambre en el universo y su antecedente la indigencia y marginalidad. (O)
