Quito.- El cuerpo de Nicole S. fue cercenado con una sierra. Los pedazos del cadáver se hallaron el 11 de abril de 2021, dentro de un recipiente cilíndrico, junto a un contenedor de basura ubicado en el barrio Solanda, en el sur de Quito.
Fiscalía impulsó una investigación por estos hechos y se determinó que, un día antes, la víctima estuvo acompañada de Álex Fernando N. C., con quien mantenía una relación sentimental.
Según un informe de la Fiscalía, horas después del crimen, él fue detenido y procesado por el delito de asesinato. Su caso llegó hasta la fase de juicio, momento procesal en el que Fiscalía demostró con prueba documental, pericial y testimonial que fue el autor material del violento asesinato.
El fiscal de la Unidad de Personas y Garantías No 5, Fredy García, probó su acusación presentando el informe elaborado por el médico legista, quien concluyó que la manera en que murió Nicole S. corresponde a la de homicida.
El 10 de abril de 2021, la víctima estuvo en la casa del procesado. Ambos consumieron licor y sustancias estupefacientes. Nicole S. quedó en estado de indefensión, lo que fue aprovechado por Álex Fernando N. C. para atacarla con un arma blanca, con la que le propinó doce heridas en el brazo izquierdo. Al final, terminó degollándola.
Tras el crimen, el procesado tomó una sierra con la que desmembró las extremidades de Nicole S. y, con el fin de evitar ser descubierto, envolvió el cuerpo y lo arrojó junto al contenedor de basura, dentro de un recipiente café.
Al momento de la aprehensión del procesado, Criminalística levantó como indicio una tela tipo sábana. Tras someterla a un análisis pericial de cotejamiento morfológico con la manta que envolvió el cadáver de la víctima, se obtuvo como conclusión que los dos indicios guardaban las mismas características físicas.
En la sierra con la que el acusado cercenó el cuerpo también se halló sangre con el mismo perfil genético de la víctima.
No hay crimen perfecto
La investigación impulsada por el fiscal García, llevó a encontrar un testigo presencial, quien narró cómo el procesado utilizó un coche metálico para transportar el cadáver hasta el contenedor de residuos sólidos.
Fiscalía recabó también pruebas testimoniales, como la de la conviviente del procesado, quien aseguró que la noche del 10 de abril de 2021, Álex Fernando N. C. se contactó con ella para enviarle fotografías, en las que aparecía él con la víctima aún con vida. Lo hizo con el fin de obligarle a que retomen su relación sentimental que estaba en crisis, según manifestó.
En su testimonio, la mujer también indicó que tiempo atrás, el procesado le envió videos de una persona degollada.
El Tribunal valoró las pruebas periciales presentadas por Fiscalía, que también sirvieron para destruir la presunción de inocencia de Álex Fernando N. C., resolviendo que adecuó su conducta en el delito tipificado y sancionado en el artículo 140, numeral 6, del Código Orgánico Integral Penal (COIP): “aumentar deliberada e inhumanamente el dolor de la víctima”, condenándolo a una pena privativa de la libertad de 26 años.
Además, el procesado deberá pagar una reparación integral de 20.000 dólares y una multa de 1.000 salarios básicos unificados. – (I)
