Gobierno Nacional emprenderá trabajos el próximo 20 de mayo.
“En Sayausí queremos ver obras definitivas y conocer los tiempos de ejecución”. Esas fueron las palabras de Martín Lucero, presidente del gobierno parroquial, al cumplirse un mes de la emergencia debido a los deslaves ocasionados por las lluvias.
Se espera que en el menor tiempo posible se cumplan los ofrecimientos del Gobierno Nacional en la recuperación del tramo El Lirio-Marianza-Zorrocucho, de cuatro kilómetros, de la vía Cuenca-Molleturo. Así como la construcción y rehabilitación de las viviendas tras el aluvión del pasado 27 de marzo.
Les preocupa el sistema de alcantarillado que colapsó en los sectores afectados, cuyas aguas residuales representan un riesgo de contaminación para el río Tomebamba. Además, necesitan del apoyo de las autoridades e instituciones con diferentes programas y proyectos para reactivar su economía.
Lucero enumeró estas necesidades cuestionando el retiro de maquinaria y la falta de información sobre el avance de los procesos para solucionar los daños. Esto, al considerar que Guillermo Lasso, presidente de la República, regresará a mediados de junio a la zona para evaluar los trabajos tras oficializar el pasado 12 de abril la declaratoria de emergencia.
Por otro lado, en el albergue de la escuela Fray Gaspar de Carvajal, de la cabecera parroquial de Sayausí, quedan solo dos familias de las 12 damnificadas porque, el pasado lunes, la mayoría abandonó el lugar de forma voluntaria.
Lo hicieron con el propósito de regresar a sus hogares, ocupar bienes de familiares o arrendar espacios cercanos para tratar de normalizar sus actividades.
Inés Guerrero, de 66 años de edad, se trasladó a la casa de una hija hasta que se concrete el ofrecimiento gubernamental de construir en un inicio siete viviendas para las familias que lo perdieron todo en el aluvión. La mujer tenía su casa al pie del deslave de Marianza, donde perdió hasta sus animales, principalmente cuyes.
“El Gobierno se comprometió en darnos casas a los que perdimos todo, lo que espera es que el municipio entregue un terreno”, indicó Inés, quien en estos días contrató a un vecino del sector para que limpie la vivienda de un hijo -que reside en los Estados Unidos- que también sintió los estragos del aluvión.
Los deslaves redujeron la presencia de vehículos por este sector. Los emprendimientos y negocios abren sus puertas con la esperanza que lleguen, especialmente turistas para que adquieran sus productos.
Vicente Chimborazo, de 45 años, mantiene su piscícola en Marianza a pesar de que en la emergencia perdió más de 27 mil truchas.
“Una reactivación todavía no existe porque aún no estamos con la vía en perfectas condiciones, ya que resulta un peligro transitar por la zona, además que el kilómetro 49 se mantiene cerrado por las obras de estabilización”, citó Chimborazo.
Los vecinos de Marianza convocaron el pasado martes a la prensa con el afán de informar estas necesidades. Los pobladores esperan por respuestas inmediatas.
Labor
El Ministerio de Transporte y Obras Públicas (MTOP) trabaja en estos momentos en los términos de referencia para contratar los estudios. A la par alista el presupuesto para la contratación de las obras que permitan recuperar el tramo vial afectado, sobre todo, en el kilómetro 10, sector Marianza.
De la misma manera, Manuel Bedoya, director distrital del MTOP en Azuay, explicó que la maquinaria se retiró del lugar porque se cumplió el primer objetivo de recuperar la circulación vehicular hasta que se contraten e inicien las obras definitivas. Sin embargo, los equipos camineros están atentos a cualquier eventualidad.
Matías Abad, gobernador del Azuay, aseguró que los trabajos definitivos iniciarán el 20 de mayo luego de cumplir con los procesos correspondientes, cuyo plazo lo determinarán los estudios.
Sobre la construcción de siete viviendas para los damnificados, se aguarda que el municipio oficialice mediante documento la donación de los predios para su construcción.
Pablo Burbano, vicealcalde de Cuenca, respondió que ya se ha puesto en consideración de la Gobernación del Azuay y del Ministerio de Vivienda (MIDUVI) los posibles predios que dispone el Ayuntamiento para la construcción de las casas.
Los terrenos están en otros sectores de la ciudad porque la administración no cuenta con predios en Sayausí.
Burbano se refirió también al problema del alcantarillado. Aseguró que existe una “disposición expresa” para que la empresa municipal ETAPA EP reconstruya los sistemas o efectúe rediseños porque existen sectores donde no se podrán recuperar las redes. (BPR)-(I)
DETALLES
– El servicio de agua potable se recuperó para más del 90 % de las familias de la zona afectada por los deslaves. La Junta Parroquial de Sayausí, la población con el apoyo municipal construyeron un “by pass” para reponer un sistema comunitario.
– La Empresa Eléctrica Regional Centro Sur normalizó el servicio de energía eléctrica después de la emergencia. Los sectores El Lirio, Gulac, Marianza, Zorrocucho, El Cajas, así como la parroquia Molleturo tuvieron inconvenientes por la falta del servicio.
MIES acredita bonos de contingencia
La parroquia Sayausí es una de las favorecidas con este aporte del Gobierno Nacional.
El Ministerio de Inclusión Económica y Social (MIES) ha entregado el bono de contingencia de 257 dólares a siete familias damnificadas en la parroquia Sayausí. Así lo confirmó el ministro Esteban Bernal sobre la atención en la zona de emergencia por los deslaves.
Bernal indicó que el bono está acreditado, sin embargo, algunas familias todavía no se acercan a cobrarlo. El funcionario recordó que el cobro se lo hace considerando el último dígito de la cédula de identidad.
También se gestiona ante el Programa Mundial de Alimentos la asignación de un bono alimenticio por 240 dólares a cinco familias afectadas, con la posibilidad de ampliar la cobertura dependiendo de los análisis pertinentes.
Asimismo, se dieron kits alimenticios, de vivienda hasta de línea blanca a los afectados por los deslaves. También se brindó atención psicosocial, pedagógica, médica, entre otros servicios.
Por otro lado, Bernal se refirió al apoyo que brinda el MIES a las personas afectadas por el aluvión del río Chantaco, en el cantón Santa Isabel; y por el desbordamiento del río Burgay, en los cantones Azogues y Biblián, de la provincia del Cañar.
En Santa Isabel se encuentran ocho técnicos realizando un censo de manera conjunta con el Servicio Nacional de Gestión de Riesgos y Emergencias (SNGRE) para identificar a las familias damnificadas y afectadas por el aluvión.
En Azogues se identificaron a ocho familias, mientras en Biblián a cinco; estas recibirán el bono de contingencia y otros beneficios. (I)
