Como no podía ser de otra manera se inició, desde lo local, la defensa del Guagualzhumi, cerro icónico del valle Cuenca Azogues; mirador natural y referente mítico, arqueológico y reserva ecológica. El presidente de la Junta Parroquial de Paccha, dio a conocer la conformación del colectivo, “Guagualzhumi Vive”, integrado por moradores de las parroquias Pacha y Santa Ana, para la defensa de lo que consideran una zona protegida y turística, que incluso cuenta con vestigios arqueológicos.
Efectivamente se trata de una zona de especiales características geográficas y culturales que deberían ser consideradas a la hora de planificar la expansión urbana; cerro, laguna, bosque y biodiversidad que convendría protegerse como “pulmón” de la gran urbanización del futuro. El Guagualzhumi con el Curitaqui y la laguna Quituña, integran una red de hitos culturales presentes en la cosmovisión andina regional, que deben ser rescatados y puestos en valor, incluso, como recurso turístico ahora que se apuesta por esta opción de desarrollo. En el entorno del cerro se podrían establecer rutas de excursiones estudiantiles, senderismo, de avistamiento de aves e interpretación geográfica, que se potenciarán con su artesanía y gastronomía, puesto que en esta parroquia se elaboran tejidos de totora como esteras y otros de carácter ornamental y utilitario, y el clásico “pan de Paccha” preparado en horno de leña.
Parroquias ricas en recursos paisajísticos, culturales y artesanales, a la hora de planificar su desarrollo deberían aprovechar las bondades de su geografía e historia como, en el caso concreto del Guagualzhumi, que ofrece tantas posibilidades como: mirador, sitio arqueológico, de recreación y turísticas, actividades de factible desarrollo, que se deberían iniciar habilitando accesos, rutas, guías y seguridad. (O)