Los azuayos Josseline Yuqui y Matías Bravo fueron los ganadores generales en el Campeonato Nacional de Triatlón que se desarrolló en Crucita, provincia de Manabí. Ambos retomaron ayer sus entrenamientos con el objetivo de ir en óptimas condiciones a la Copa Regional de Desarrollo del Triatlón Mundial, en la Ciudad de Panamá, el 19 de junio.
Bravo estudia Pedagogía de la Actividad Física. Destaca el apoyo de la Universidad Católica de Cuenca para llevar de la mano el estudio y el deporte. No todos tienen esa flexibilidad en el horario, por eso el profesor Ángel Matute apela a la disciplina de sus dirigidos.
Cada uno debe completar la planificación por su cuenta -cuando tenga tiempo- un segmento de atletismo, gimnasio o ciclismo tras la jornada matutina en la que se dan cita todos desde las 05:00.
Son entre cinco a seis horas de entrenamiento diarios los que forjan a los triatletas azuayos, además de la alimentación y un buen descanso. “Cada día aporta un granito de arena, tenemos que ser constantes porque si fallamos un día son dos granos menos de arena”.
Para Yuqui, la recuperación ante una seguidilla de competencias será fundamental para tener un buen desempeño en próximos eventos internacionales incluido los Juegos Bolivarianos de Valledupar donde hará equipo con las coterráneas Paula Vega, Elizabeth Bravo y la imbabureña Paula Jara.
Por ahora Josseline estudia inglés los martes y jueves en horario vespertino. Eso le ayuda a cumplir con las jornadas de entrenamiento. Ella coincide con Bravo que, al entrenar en piscina, les falta mejorar un poco la entrada y salida al mar, también en las transiciones.
RESULTADOS DEL TRIATLÓN CRUCITA 2022
