Recife (Brasil) (EFE).- Las tradicionales fiestas «juninas» de la ciudad de Caruarú, consideradas las mayores del mundo en homenaje a San Juan, dejaron este sábado los escenarios virtuales para convertirse en el primer gran evento masivo callejero en Brasil después de la pandemia.
Caruarú, una de las mayores ciudades del agreste «nordestino» de Brasil y reconocido polo textil del país, recibe durante los cuatro fines de semana de junio y el primero del mes siguiente cerca de tres millones de personas para sus tradicionales fiestas «juninas».
Los habitantes de Caruarú y sus alrededores y una gran cantidad de turistas, la mayoría de Recife, la capital del estado de Pernambuco y distante 150 kilómetros, comenzaron a tomar desde el viernes las calles de la ciudad, sedientos de la mayor fiesta regional, que volvió tras dos años de ausencia por la pandemia deloronaviruis.
Las lluvias que por esos días azotan con fuerza a Recife y dejaron desde el pasado 22 de mayo y hasta la fecha 128 muertos por causa de deslizamientos e inundaciones, no impidieron que centenas de automóviles dejaran la litoral capital para invadir Caruarú, una de las cunas del forró, una tradicional danza a ritmo de acordeón.
En la región Nordeste no se celebró este año el Carnaval, que se limitó al espectáculo, fuera de fecha, en los sambódromos de Río de Janeiro y Sao Paulo, con límite de público y sin las masivas comparsas callejeras, que en ciudades como Recife o Salvador atraen a dos millones de personas en un único desfile.
Por eso, «las fiestas ‘juninas’ tienen esta vez un significado de esperanza y de vida que va más allá de la diversión» como contó a Efe la odontóloga y «forrozeira» Salomé Días, natural de Caruarú y que reside en Recife, quien nunca faltó a la fiesta de su ciudad en sus 67 años de vida.
«Para Caruarú, para Pernambuco y para todo Brasil esta fiesta es un homenaje a los que partieron por causa de la pandemia y un sorbo de esperanza para los que quedamos», afirmó Días, quien es una imitadora oficial de Elba Ramalho, la «Reina del Forró» y justo la encargada de abrir oficialmente los conciertos.
En la primera noche, además de Elba Ramalho, se presentaron Claudia Leite, quien ya grabó con los puertorriqueños Ricky Martin y Daddy Yankee y el cubano Pitbull, y Solange Almeida, otra de las cantantes más exitosas de forró.
El domingo la programación continuará con el polifacético Alceu Valença y Dorgival Dantas, otro exponente máximo del forró, para volver los próximos fines de semana con una lista de importantes artistas brasileños como el famoso pinchadiscos Alok, Simone e Simaria, Luan Santana y Wésley Safadao, entre otros.
En total son 800 presentaciones en 24 polos, como se conocen los multitudinarios espacios abiertos que acogerán la programación musical, acompañada de festivales gastronómicos con platos gigantes que siempre buscan el Guinness Record, artistas callejeros, comparsas «juninas» y diversas expresiones culturales.
Los «forrozódromos», como se conocen las gigantes carpas con bandas de forró sin renombre, también acogen todos los días a bailarines profesionales y aficionados de ese ritmo surgido en las regiones áridas que cada vez se internacionaliza más.
Según el alcalde de Caruarú, Rodrigo Pinheiro, la fiesta «junina» genera una cifra de negocios por 300 millones de reales (unos sesenta millones de dólares) y 7.000 empleos, que se recuperan tras haber sido perdidos durante los dos años de la pandemia. EFE
