Doce departamentos de los 101 que hay en Francia han sido puestos en alerta roja por la ola de calor que golpea el país y que se agravará de cara al fin de semana, con temperaturas de hasta 40 grados en varias ciudades del sudoeste.
La primera ministra francesa, Élisabeth Borne, informó en Twitter de la activación de esa alerta, avanzada por la agencia meteorológica nacional Météo-France, y pidió a la población que se hidrate y preste atención a esta situación.
«Permanezcan alerta. Hidrátense, quédense al fresco, den y pidan noticias a sus seres queridos», escribió Borne en Twitter.
Los departamentos más afectados por esta ola de calor, con temperaturas récord para un mes de junio, son los del sudoeste y la costa Atlántica.
El pico de la canícula se espera el viernes y el sábado, en un episodio que podría superar los récords de temperaturas alcanzados en la fuerte ola de calor que se registró en junio y julio de 2019.
Este sistema de vigilancia con alerta roja, que prevé una movilización máxima de los centros sanitarios, remonta a 2004, un año después de la ola de calor histórica en Francia en el verano de 2003 que provocó más de 15.000 muertos en el país.
Son más frecuentes las alertas naranjas, pero es la primera vez que una alerta roja se activa a estas alturas de junio. Las precedentes habían tenido lugar en los últimos días del mes y en julio, en 2019, así como en agosto de 2020.
Actualmente, Météo-France ha declarado además la alerta naranja en otros 25 departamentos.
En los departamentos en alerta, la agencia estima que las temperaturas mínimas durante las próxima noche estarán entre los 19 y los 23 grados, y que se alcanzarán máximas de 40 grados en numerosas ciudades del sudoeste.
En París, las máximas para este jueves son de 30 grados, aunque lo peor se espera para el sábado, cuando se superarán allí los 38 grados. EFE
