El líder indígena Leonidas Iza, principal promotor de las protestas contra el Gobierno por el alto coste de la vida en el país, negó este sábado haber iniciado un diálogo con el Ejecutivo tras haber mantenido una primera toma de contacto con varios de sus miembros.
Iza, presidente de la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (Conaie), hizo esta aclaración a los miembros de sus organizaciones que pensaban que el diálogo se había iniciada sin consultarles previamente a ellos.
El dirigente indígena afirmó que acudieron a este encuentro celebrado en la Basílica del Voto Nacional, de Quito, «por respeto» al presidente de la Asamblea Nacional (Parlamento), Virgilio Saquicela, quien propició esta primera toma de contacto entre ambas partes.
Por parte del Gobierno asistieron los ministros de Gobierno, Francisco Jiménez; y de Relaciones Exteriores, Juan Carlos Holguín, mientras que Iza estuvo acompañado por los dirigentes las otras organizaciones que lideran las protestas.
Saquicela informó de que en la reunión se propuso conformar una mesa técnica con delegados del movimiento indígena y del Gobierno para iniciar el proceso de diálogo y analizar cada una de las propuestas planteadas por los manifestantes.
No obstante, en su pronunciamiento nocturno en redes sociales, Iza fue enfático al señalar que en esta reunión «no se ha tocado ni un solo punto» del pliego de diez demandas que llevó a la Conaie y a otras organizaciones del movimiento campesino a convocar una movilización nacional e indefinida desde el lunes 13 de junio.
«Sin la posibilidad de tocar ningún punto, nos hemos retirado», afirmó Iza, que aclaró que cualquier decisión para iniciar un diálogo será consultada antes a las 53 autoridades de pueblos y nacionalidades indígenas que conforman el órgano de decisión de la Conaie.
«Ahora estamos analizando todas las circunstancias de estos trece días que hemos mantenido en la lucha», sostuvo, al tiempo que recordó que las movilizaciones continúan.
Hasta el momento las protestas dejan un saldo de cinco fallecidos y no menos de 200 heridos entre manifestantes y fuerzas de seguridad, así como más de 100 detenciones.
Desde el movimiento indígena se exige el cumplimiento de un pliego de diez demandas, entre ellas que se reduzcan y congelen los precios de los combustibles, que se controlen los precios de los productos de primera necesidad, que no se privaticen empresas estatales y que no se amplíe la actividad petrolera y minera en la Amazonía. EFE