Miami (EFE).- La Policía de carreteras de Florida descubrió a ocho inmigrantes indocumentados dentro de una camioneta, al dar el alto a su conductor por llevar las ventanas con vidrios polarizados que no están permitidos, informaron medios locales.
El conductor, el mexicano Javier Palma-Jenaro, de 40 años, fue detenido y los ocho inmigrantes puestos a disposición de las autoridades migratorias, según la información de la Florida Highway Patrol (FHP) sobre el suceso ocurrido en el condado Hernando (oeste de Florida).
La camioneta, con placas del estado de Arizona, fronterizo con México, llevaba pegatinas con la bandera de EE.UU. en las ventanas.
De acuerdo con la información policial, dentro de la parte trasera de la camioneta había ventiladores y cajas de agua y refrescos y los ocho inmigrantes, cuyas identidades y nacionalidades no se han revelado, llevaban todos puestas camisetas iguales de color amarillo fluorescente.
Cuando los patrulleros le dieron el alto y le pidieron su documentación, Palma-Jenaro presentó un pasaporte mexicano y una licencia de manejar del mismo país ya expirada.
El mexicano se encuentra detenido en la cárcel del condado Hernando y enfrenta cargos por tráfico de personas, además de varias infracciones de las normas de tráfico.
El suceso cobró más notoriedad a la luz de la reciente muerte de 53 inmigrantes que viajaban hacinados en un camión con apariencia de vehículo refrigerado que fue hallado abandonado en San Antonio (Texas).
La Patrulla de Carreteras de Florida dijo en un comunicado que Palma-Jenaro confesó en un interrogatorio que viajó desde Milwaukee hasta Phoenix (Arizona) a buscar a los ocho inmigrantes, a los que debía llevar hasta un lugar de Fort Myers (suroeste de Florida).
El detenido, que tenía 3.700 dólares en su poder, dijo a los patrulleros que cobró 250 dólares por cada pasajero.
El miércoles pasado en Sumter, otro condado floridano, los patrulleros detuvieron al conductor de un vehículo con placa vencida de Texas y una grieta en el parabrisas.
Junto al conductor, José Juárez, iba un hombre que presentó un pasaporte mexicano sin sellos de entrada a EE.UU. y que luego se confirmó que había sido deportado una vez.
El jueves pasado, la Corte Suprema de Florida aceptó una petición del gobernador de Florida, Ron DeSantis, para crear un gran jurado con competencia en todo el estado que se ocupe especialmente del tráfico de personas, incluyendo inmigrantes y niños extranjeros que llegan al país sin compañía.
DeSantis, un conservador que aspira a ser reelegido gobernador este año y, según distintas fuentes, puede competir con Donald Trump por la nominación presidencial republicana en 2024, es un defensor de la tolerancia cero frente a la inmigración irregular.
La Corte ordenó crear «sin demora» ese jurado especial, que funcionario en principio durante doce meses y estará presidido por la jueza Ellen S. Masters.
Se dedicará a investigar delitos, formular acusaciones y realizar todas las demás funciones de esos cuerpos judiciales. EFE