Sayita es una perrita de mediana edad que vivía en los alrededores del mercado central de Sayausí.
Su situación de calle y el continuo maltrato por parte de los moradores hizo que su piel se llenara de hongos que generaban mal olor. Lo que provocó que sea ahuyentada con piedras, agua y aceite hirviendo para evitar que se acercara a los locales comerciales en busca de alimento.
Gracias a una denuncia realizada en el grupo Rescate Animal Cuenca fue rescatada y su recuperación avanza en el albergue de la fundación donde convive con animales, que al igual que ella, fueron rescatados y son atendidos por cuidadoras que los llenan de cariño y amor hasta que encuentre una familia responsable que los adopte.
Como Sayita hay miles de historias de animales que sufren maltrato y que no tienen la oportunidad de ser rescatados porque las fundaciones y la Unidad de Gestión Ambiental (UGA) del Municipio de Cuenca no se dan abasto para todos los casos.
Historias en cifras
El último dato aproximado que tienen los colectivos de defensa de derechos de los animales sobre cuántos animales vivían en situación de calle en Azuay es del 2020: alrededor de 60.000.
De estos, solo 2.000 se encontraban en refugios y centros de rescate. Los colectivos estiman que en este 2022 la cifra siga aumentando.
Este dato lo corroboran Marcelo Cordero, miembro de la UGA, y Carmita Ávila, presidenta de Rescate Animal Cuenca, quienes concuerdan en que el problema va más allá de las leyes y normativas y radica en la falta de educación por parte de los ciudadanos que maltratan y abandonan animales en la calle.
Pero, ¿Qué es maltrato animal?
En Cuenca el maltrato animal en todas sus concepciones es una realidad que crece frente a los ojos de la sociedad.
Josué Rey, doctor en la Clínica Veterinaria Solidaria, explica que el maltrato animal no solo se manifiesta a través de violencia física y abandono. También puede ser psicológica y se refleja en animales que sufren estrés y ansiedad por vivir en ambientes limitados, cerrados y encadenados.
Pese que hay una ordenanza municipal del 2016 que prohíbe y sanciona el maltrato y la reproducción ilegal de animales con fines comerciales a la sociedad, el número de denuncias crece con los años.
Cordero comenta que la UGA recibe 40 denuncias mensuales de algún tipo de violencia, una cifra enorme para los cuatro técnicos que se encargan de investigar y procesar las querellas antes de llegar a la instancia sancionadora.
Ávila cree que la ordenanza es un paso muy grande pero que las sanciones deberían ser más fuertes.
“Los animales se comercializan en redes sociales, puestos informales y hasta en veterinarias donde el comprador elige la raza del animal que desea que puede llegar hasta 500 dólares en gatos o perros, (esto) mientras hay miles en las calles esperando ser adoptados”.
¿Cómo denunciar?
Las denuncias a través de medios de comunicación o redes sociales no siempre pueden ser sancionadas, por eso es imprescindible conocer cuándo una denuncia es viable y cuáles son los pasos para realizarla.
Pasos para denunciar maltrato animal en la UGA
- Presentar datos personales del denunciante (nombres y número de cédula)
- Datos del presunto infractor (dueño o cuidador)
- Lugar exacto de los hechos (captura de Google Maps) o dirección precisa
- Evidencia clara de lo que se denuncia (fotografías o videos)
Canales para emitir denuncias
- Teléfono Municipio Cuenca 4134900 ext 1650.
- Sistema “Mi Voz” disponible en aplicación Cuenca en Línea.
- Correo electrónico. uga@cuenca.gob.ec
- Oficinas Unidad de Gestión Ambiental / sector Parque de la Libertad.
Las denuncias falsas por riñas familiares son muy comunes y solo retrasan el trabajo de los técnicos y afectan directamente a los animales maltratados que necesitan ayuda, según Cordero.
Tenencia responsable
Para integrar a un animal como miembro de la familia es necesario que el cuidador esté consciente de lo que significa tenencia responsable.
Para el veterinario Josué Rey los factores económicos o de tiempo no son excusas para no priorizar el bienestar de una mascota ya que hay opciones económicas que solventan sus necesidades.
Vacunas, desparasitantes, planes sanitarios, esterilizaciones, paseos diarios y un buen alimento son requisitos básicos para que una mascota pueda vivir en plenitud y no se vea afectada su salud física y emocional.
Si hay un punto en la que las autoridades, las fundaciones y los veterinarios están de acuerdo es que para practicar una tenencia responsable y evitar el maltrato y abandono animal se debe trabajar en la educación de las personas.
Y se refiere en no ver a las mascotas como guardianes de casas, juguetes para niños o medio de sustentación económica, sino como seres vivos que necesitan los mismos cuidados y atención que las personas.
Para que la historia de Sayita no se repita es necesario educarnos como sociedad, aceptar que el maltrato animal es una realidad latente y que debemos mirarla y afrontarla con acciones como eliminar la compra ilegal de animales, practicar la adopción y esterilización responsable y ser cuidadores comprometidos con el bienestar de nuestras mascotas, concluyeron los entrevistados.