Bruselas (EFE).- El alto representante de la Unión Europea (UE) para Asuntos Exteriores, Josep Borrell, consideró este sábado que el Premio Nobel de la Paz otorgado este año a defensores de los derechos humanos de Bielorrusia, Rusia y Ucrania supone “esperanza” y “una luz en medio de la oscuridad” frente a la represión y la guerra en esos países.
«La decisión de conceder el Premio Nobel de la Paz de este año a estos campeones de la democracia y los derechos humanos es un signo de esperanza y luz en medio de la oscuridad de la represión interna en Rusia y Bielorrusia y de la guerra ilegal de agresión de Rusia contra Ucrania”, señaló en un comunicado Borrell.
El jefe de la diplomacia comunitaria aseguró que la UE “acoge con satisfacción” la concesión del Nobel de la Paz al defensor de los derechos humanos bielorruso Ales Bialiatski, a la organización rusa Memorial y a la organización ucraniana de Centro para las Libertades Cívicas, y felicitó a los galardonados por “su incansable e inestimable labor”.
Borrell apuntó que Bialiatski es fundador del Centro de Derechos Humanos Viasna y que lleva 30 años defendiendo los derechos humanos en Bielorrusia y, de forma particular, a los presos políticos.
Gravemente enfermo, recordó que Bialiatski está encarcelado desde el 14 de julio de 2021 y se enfrenta a 12 años de prisión.
“Es uno de los más de 1.300 presos políticos de Bielorrusia encarcelados por el régimen de (el presidente bielorruso, Alexsandr) Lukashenko”, afirmó.
De Memorial, Borrell destacó que es una de las voces independientes más importantes de la sociedad civil rusa, y que su trabajo “sigue siendo fundamental para la defensa de los derechos humanos y contra los intentos de manipular la memoria histórica de la represión política en el país”.
“A pesar de los intentos políticamente motivados de las autoridades rusas de silenciar a Memorial persiguiéndolo y cerrándolo, su trabajo sigue desempeñando un papel único para el pueblo ruso y toda Europa”, recalcó Borrell.
Por lo que respecta al Centro para las Libertades Cívicas, dijo que es “miembro importante de la fuerte y vibrante sociedad civil ucraniana, que avanza y promueve los derechos humanos, el Estado de derecho y la democracia en Ucrania”.
Según señaló, desde el comienzo de la guerra rusa en Ucrania, este centro ha mostrado su firme compromiso con actividades para que asuman responsabilidades los rusos que hayan cometido crímenes de guerra.
“Esta labor será clave para garantizar que Rusia, sus dirigentes políticos y todos los implicados en las continuas violaciones del derecho internacional, rindan cuentas”, subrayó Borrell. EFE