“Cuando nos enteramos del aislamiento por 40 días fue difícil. Nosotras vivimos del día a día, salimos a las ferias, mercados y las plazas a vender nuestros cultivos”. Así recuerda Carmen Tigre los momentos más complicados de la pandemia de la COVID-19 junto con sus compañeras de la asociación “Jatari Wuarmi”, de la parroquia Jadán, del cantón Gualaceo.
Sin embargo, cree que no todo fue malo porque afrontar la pandemia hizo que las personas que residen en las ciudades valoren el trabajo de las mujeres de las comunidades. Aunque la situación económica aún es compleja para ellas luego de más de dos años de la emergencia sanitaria.
Carmen, de 53 años de edad, participa desde ayer con otras mujeres de las 61 parroquias azuayas en una feria organizada por el Gobierno Provincial que reconoce su esfuerzo y dedicación por el Día Internacional de la Mujer Rural. En el evento -que concluirá hoy- comparten sus experiencias y sueños con los demás.
Perseverancia
“Cuatro mujeres de mi comunidad iniciamos nuestro emprendimiento. Hoy somos 11 personas, de las cuales, siete son mujeres”. Esas fueron las palabras de María Palaguachi, integrante de la asociación “Anita Granja”, de la parroquia Turi, del cantón Cuenca.
Para María, de 58 años de edad, las carencias económicas que generó la pandemia fue el motor principal para que estas mujeres emprendan desde el 2021. Lo hacen en la elaboración de vinos y mermeladas artesanales de moras y uvillas que las cultivan en sus parcelas.
Su emprendimiento se consolida con el transcurso de los días. La asociación cuenta con un puesto de venta en el sector Loma de Monjas y recorren la ciudad para vender sus productos.
Las mujeres del sector rural también reflejan el trabajo en equipo que se fortaleció a raíz de la emergencia sanitaria. Rosario Guzmán y su hija Rosa Sarmiento, de 76 y 34 años de edad, respectivamente, son una muestra de esto.
Ambas, oriundas de la parroquia Mariano Moreno, del cantón Gualaceo, cultivan juntas en el campo y elaboran canastas artesanales que comercializan en diferentes cantones.
Rosa comenta que por varios meses afrontaron con su madre momentos difíciles porque no podían salir a vender sus productos, especialmente las canastas. “La valentía que nos caracteriza como mujeres rurales hizo que no decaigamos. Hoy estamos de pie hasta que Dios lo disponga”, asegura.
Las mujeres de las comunidades tienen un estilo de vida totalmente distinto. La pandemia afectó su labor pero no fue un obstáculo para que continúen con las mismas energías para tratar de sacar adelante a sus familias. Cuenca. (I)
Trabajo constante
El Gobierno Provincial del Azuay, a través de la Dirección de Equidad y Género, atiende de forma directa a 1.500 e indirectamente a 3.000 mujeres de los 15 cantones.
De acuerdo con Ximena Bernal, responsable de dicha dirección, se encaminan programas de prevención de violencia, emprendimientos productivos, además de acciones de carácter cultural para mantener las costumbres y tradiciones de los pueblos.
Se evidencia que los principales problemas que afrontan los mujeres de los sectores rurales son las dificultades para acceder a la participación política, así como a créditos para sus emprendimientos, servicios de salud, entre otros.
“La Prefectura desde sus competencias aporta en la reducción de estas diferencias entre hombres y mujeres”, aseveró Bernal. (I)
Detalles
– El Gobierno Provincial efectúa en el Portal Artesanal de la Empresa Municipal EDEC EP (San Blas) la segunda edición de la “Warmi Feria”. El evento reúne a productoras y emprendedoras de las 61 parroquias azuayas.
– Las actividades continuarán hoy, a las 08:00, con una marcha denominada “Reivindicación de los Derechos de la Mujeres Rurales”, desde el Parque Calderón hasta el Portal Artesanal de la EDEC EP.
