El Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) alertó este jueves, 10 de noviembre de 2022, sobre la «preocupante» situación de la infancia en Ecuador, donde el 27 % de niños y niñas sufren de desnutrición crónica.
«Este es un dato muy grave» para la infancia, pues un menor con desnutrición tendrá problemas en la escuela y será «un adulto con problemas para insertarse en el mercado laboral», dijo a la prensa la representante de Unicef en Ecuador, Luz Ángela Melo.
Melo añadió que el 50 % de menores en Ecuador «sufren en sus hogares de maltrato físico y psicológico» y unos 252.000 niños están fuera del sistema escolar.
«En 2021, cinco niñas de 10 a 14 años dieron a luz cada día, eso significa que cinco niñas cada día fueron víctimas de violencia sexual», dijo al señalar que se trata de un «dato muy, muy grave».
Consultado por EFE, Paúl Guerrero, oficial de Monitoreo y Evaluación de Unicef, detalló que en 2021 nacieron 1.843 niños de madres entre 10 y 14 años, y 39.486 de madres adolescentes entre 15 y 19 años.
«Hay altas probabilidades de que las niñas nacidas de madres adolescentes repitan ciclos«, alertó Melo.
La punta del iceberg
La infancia es la tercera parte de la población en Ecuador, es decir seis millones de niños, niñas y adolescentes, dijo Melo al señalar que casi una tercera parte de los niños «sufren desnutrición crónica infantil». «Esa es la punta del iceberg, y un problema multicausal», agregó.
La representante de Unicef recordó que Ecuador es el segundo país en América Latina, después de Guatemala, con mayores índices de desnutrición crónica infantil.
Además, se mostró «profundamente preocupada» porque el «70 % de los niños menores de tres años no tienen acceso a servicios de educación temprana».
Por la pandemia de la covid-19, Ecuador fue uno de los países de América Latina «que tuvo las escuelas cerradas el mayor tiempo, y los centros de educación temprana estuvieron cerrados más tiempo que las escuelas«, anotó.
«No sabemos aún las consecuencias entre los niños que no pudieron ir a las escuelas durante dos años, o que no pudieron asistir a centros de desarrollo infantil», advirtió Melo, al señalar que por esto es «más importante que nunca que pensemos en la infancia».
Por otra parte, en 2019, entre los adolescentes de 15 y 17 años había un trabajo infantil de 17,8 % y a diciembre de 2021, el porcentaje subió al 23,6 %, según encuestas oficiales citadas por Unicef.
«Estos datos presentan un reto enorme al país, invitan al país a que se concentren y den prioridad a la infancia», dijo Melo al reiterar que la situación es «muy preocupante».
«Primero la infancia»
En este contexto, Unicef presentó este jueves una campaña denominada «Primero la infancia» con la que busca que «en todos los estamentos de la sociedad, cada uno en su rol le dé prioridad a la infancia».
Así, invitan a empresarios a que en sus lugares de trabajo sumen a la de género la perspectiva de infancia.
La agencia de la ONU ofrece, por ejemplo, herramientas para que los empleados tengan mejores pautas de crianza con los menores, para que se abran salas de lactancia y para que haya conciliación entre la vida familiar y la laboral.
Asimismo, invitan a las organizaciones de derechos humanos para que profundicen en el monitoreo de la situación de los derechos humanos en el país, y a las ONG de mujeres para que en su trabajo articulen la violencia contra las mujeres, por ejemplo, con la que sufren los menores.
«Si en un hogar hay una mujer víctima de violencia, muy seguramente los niños son víctimas también de violencia o son afectados porque están viendo cómo su madre es víctima de violencia«, dijo al recordar también la difícil situación de los menores víctimas de feminicidio.
La campaña de Unicef «es un clamor para que la sociedad se vuelque para trabajar por los niños y las niñas«, subrayó. EFE