Por lo general, las festividades de diciembre representan momentos de unión familiar y algarabía. Sin embargo, para algunas personas esta época es, más bien, sinónimo de melancolía, dolor y vulnerabilidad por situaciones difíciles que pudiesen estar atravesando. Según el Dr. Gregory Celis, Director Médico de Laboratorios Bagó, “El estado de tristeza, estrés y desesperanza profunda en una persona ante la llegada de Navidad y Fin de Año, es conocido popularmente como depresión navideña, y según la Organización Mundial de la Salud (OMS), el 6 % de la población es propensa a sufrirla en esta temporada.”
Dado que la depresión no está relacionada con la edad, ni la raza y/o nacionalidad, cualquier persona podría verse afectada en determinado momento por esta enfermedad, lo que muy probablemente desencadenaría problemas en sus relaciones interpersonales, e inclusive en su capacidad de desempeñar acciones rutinarias.
Por ello, y a propósito del inicio de diciembre y la celebración de la Navidad, el representante de expone a continuación las principales causas de la depresión navideña, así como señales que evidencian su padecimiento y recomendaciones para prevenirla.
Sobre la depresión navideña y sus causas más comunes
- “Es importante entender que hay ciertas personalidades que son más proclives a eventos de ansiedad y que, en algunos casos, esto se debe a una predisposición genética”, puntualiza el Dr. Celis.De hecho, la depresión constituye la principal causa de suicidio a nivel mundial, especialmente en hombres de entre 30 y 40 años, por lo que debe ser tomada con mucha seriedad.
- Muchos factores pueden ser detonantes de la depresión navideña, pero los más comunes son:
- Soledad. Lamentablemente, no todas las personas tienen la dicha de poder pasar la Navidad rodeada de su familia o de sus seres queridos, por lo que se ven obligados a estar solos. “La soledad en Navidad es uno de los principales problemas con los que deben lidiar quienes, por una u otra razón, deben vivir distanciados de su círculo familiar o amistoso”, explica el experto.
- Muerte de un familiar o amigo. En la época de Navidad, el sentimiento de nostalgia por quienes ya no están puede ser mucho más intenso. “Las fiestas tienen la particularidad de hacer que la ausencia de los seres amados sea más evidente, por lo que el vacío emocional se intensifica. “Cuando esto sucede, lo más sano es poder encontrar a otra persona que esté dispuesta a sentarse y hablar de ello, de manera que ese sentimiento no quede oculto, sino que el afectado pueda desahogarse y sentirse más aliviado”, sugiere el especialista.
- Migración. Ya sea que el paciente deprimido haya sido el que debió migrar, o sus parientes sean los que viajaron, este fenómeno social también puede ser determinante en el padecimiento de la depresión navideña. “Alguien afectado por la migración puede llegar a sentirse apagado, desmotivado, y sin energía ni razones para celebrar la Navidad”, dice Celis, quien añade que, de experimentar esto, se pueden aprovechar las herramientas tecnológicas existentes hoy en día, para tener, aunque sea, un contacto telefónico o virtual con sus seres queridos que traiga algo de felicidad al momento.
- Dificultades económicas. Sin lugar a dudas, una crisis financiera puede generar preocupación y angustia en quienes la atraviesan. “En la Navidad, que es una festividad caracterizada por la compra masiva de regalos, tener que optar por la austeridad puede provocar zozobra en la persona, más aún cuando se ven imposibilitados, por ejemplo, de cumplir con los deseos de sus hijos pequeños”, comenta el Director Médico. La recomendación que brinda ante este escenario es procurar mostrarse agradecido por todo lo bueno que ocurra en su vida, como su óptima salud y la de sus familiares.
Sobre las señales que alertan de una posible depresión navideña
- Es probable que alguien que padece de esta patología no necesariamente sea consciente de que es así, por lo que resulta fundamental que su círculo esté alerta a algunas manifestaciones que suelen ser indicadores de ello:
- Tristeza profunda
- Aislamiento social
- Negatividad ante la vida
- Consumo excesivo de alcohol y drogas
- Anorexia y/o bulimia
Sobre las medidas de prevención y las recomendaciones a seguir
- Para poder prevenir la depresión navideña, el primer paso es saber si existen causas que la disparen en esta época. De ser así, es importante recibir terapia temprana, para evitar que los síntomas de la depresión se potencien.
- Otra medida de gran relevancia es acudir a un médico que pueda determinar, tras una evaluación integral, si el paciente requiere de apoyo psicológico o psiquiátrico, y/o si se debe administrar medicación.
- Ante la presencia de la depresión navideña, no se debe optar por la automedicación.
- “La persona debe saber que puede desenvolverse en cualquier ambiente y lugar, siempre y cuando cuente con apoyo y monitoreo de sus familiares y amigos, evitando así la soledad”, recalca el representante.