El volcán Sangay, el más activo de Ecuador y en erupción desde 2019, registró en la noche de este miércoles, 30 de noviembre de 2022, una serie de explosiones que hicieron vibrar ventanales a 175 kilómetros de distancia, según reportó el Instituto Geofísico (IG) de la Escuela Politécnica Nacional.
Estas explosiones se percibieron en el norte de Macas, cercana al volcán, pero también en varios sectores de los alrededores de Guayaquil, que se encuentra al otro lado de la cordillera de los Andes y a 175 kilómetros en línea recta del volcán.
Esto se produce por «condiciones particulares de la atmósfera que permiten la propagación del sonido por zonas preferenciales para finalmente alcanzar grandes distancias», de acuerdo al IG.
Las explosiones han ido acompañadas de la emisión desde el cráter de bloques balísticos y material incandescente, dentro del proceso eruptivo que registra el Sangay desde 2019.
Por otra parte, las observaciones satelitales indican que las emisiones de ceniza para esta noche son bastante pequeñas y limitadas únicamente a las inmediaciones del volcán.
El Sangay, de 5.230 metros de altitud, se encuentra en las estribaciones orientales de los Andes, dentro de la provincia amazónica de Morona Santiago, ubicada en el sureste de Ecuador.
El volcán es parte del Parque Nacional Sangay, declarado Patrimonio Natural de la Humanidad por la Unesco desde 1983, un entorno sin poblaciones cercanas que pudiesen estar en riesgo ante este proceso eruptivo.
Son tres los volcanes con actividad actualmente en Ecuador, pero sólo el Sangay está en erupción, mientras que El Reventador, en el norte; y el Cotopaxi, cerca de Quito, registran emisión de gases y cenizas. EFE