El 24 de febrero el ejército ruso invadió Ucrania frente a la mirada atónita del mundo, parecía una guerra donde Rusia conseguiría una fácil victoria. La comunidad internacional protestó contra la agresión militar a Ucrania, los países de la OTAN apoyaron su defensiva militar con millones de euros y sanciones económicas contra el invasor. Está guerra lleva más de 300 días, Europa tendrá uno de los inviernos más gélidos por la falta de gas ruso; existen gran cantidad de personas en situación de desplazamiento y refugio, migración y traumas propios de la guerra.
Ucrania ha resistido contra todo pronóstico, el papel del Presidente Zelenski ha sido fundamental en la psicología y ánimo de sus tropas, ha logrado victorias militares con sus relatos cargados de emoción y coherencia en lo que dice y hace, sus puestas en escena lo convierten en David contra Goliat. Muestra el horror de la guerra y el corazón de Ucrania, con guion de ética y sacrificio al estilo de la sátira política de la que fue protagonista, Servant of the people, identificó un villano para el mundo: Vladimir Putin.
Zelenski utiliza las redes sociales y comunica desde el día uno de la agresión cuando rechazó la propuesta de EEUU de salir por su seguridad, y respondió “necesito municiones, no un aventón”. Esa habilidad, sumada al gran valor de su pueblo, se han convertido en escudo infranqueable para el ejército ruso.
Putin termina el año visitando al autoritario Aleksandr Lukashenco, bromeando con procaz sarcasmo sobre quién es más peligroso, en medio de ataques a plantas de energía Ucraniano en tiempos de navidad. La otra cara de la moneda la protagoniza Zelenski, quien visita a sus tropas en el frente de batalla y llevando una bandera firmada por soldados se dirige al Congreso de los EEUU y pone el relato y su grito de guerra en navidad «podrán quitarnos la electricidad, pero esta nochebuena, los ucranianos celebrarán las fiestas en familia y los rusos no podrán apagar la luz de su fe».
Su causa no se va con las manos vacías, ha conseguido sistemas de defensa antiaérea adicionales, un paquete de apoyo de 18 billones de dólares y ya es una leyenda. (O)
