Con un talante respetuoso los candidatos/as a prefectos del Azuay, intercambiaron distintas visiones institucionales, sin embargo coincidieron sin excepción en el sufrido diagnóstico de abandono de la vialidad en la Provincia y en sus conexiones con el resto del país, agravadas en los últimos años, sin duda alguna terminó siendo el eje focal en la discusión, cuando todos aludían a la penosa realidad de las conexiones terrestres, que no se morigeraron aun cuando algunos presentes, estuvieron en cargos relevantes para al menos retocar los caminos venidos a menos, que terminaron reconociendo la inacción, de manera tapiñada, aludiendo a su dependencia del Ministerio de Finanzas y/o acudir a lo esotérico de la maldición Azuaya, cuando se cuenta con un Ministro de Obras Públicas de Cuenca. ¿Hasta cuándo se entenderá la seriedad de la situación, precisamente para empezar a revertirla?
Otro aspecto de consenso fue el asumir de llegar al cargo la defensa de los sectores de recarga hídrica. Cumpliendo el mandato popular de los comprovincianos en el año 2021, sin embargo un candidato aclaró que los efectos surtían para luego de dicha fecha, sin contradicción de los asistentes, Será un tema importante de la gestión de la nueva autoridad, ante la mirada atenta de los Azuayos, que bajo ningún concepto aceptaremos cualquier intervención que ponga en riesgo a las fuentes de agua que alimentan a la ciudad y a sus campos. Algo que se reiteró en la conversación fue por pare de al menos la mitad de los participantes que las rentas estatales que por ley corresponde a la corporación serán solicitadas con firmeza, para darle uso eficiente en bien de la comunidad rural. Recuperando a su entender la dignidad Azuaya venida a menos en los últimos tiempos.
Seremos los electores, que pondremos en la prefectura por decisión mayoritaria a quien esperamos tenga la voluntad política de avanzar en bien de la gente. El debate es un insumo valioso para reflexionar de acuerdo a nuestro criterio, partiendo que el 90 % de los postulados han estado en cargos de elección o de designación y sabemos de sus ejecutorias.
¿En definitiva acertaremos? (O)