Sorbos, la magia y la cultura del café en Cuenca

Atrapada por la magia y el aroma del café. Elena Tepán es barista profesional y como propietaria lidera un equipo de jóvenes que son parte de Sorbos, una empresa que surgió en el 2017 con el propósito de impulsar la cultura cafetera en Cuenca.

Elena cursó sus estudios de Gastronomía en el Instituto Sudamericano, allá por el 2012. Pero tenía una meta clara: ser barista, una especialidad que no era muy conocida en esa época. Esto la llevó a viajar a Quito para capacitarse con expertos que llegaban a esa ciudad desde otras latitudes, sobre todo, de Colombia, un país cafetero.

Se preparó y tuvo la oportunidad de ganar experiencias en tueste, cataciones y bebidas en Quito y Guayaquil.

Para cumplir con su meta, la joven emprendedora retornó a Cuenca a cubrir un nicho que descubrió estaba vacío. Junto a su esposo Johnny Campoverde, comparte el gusto y la pasión por este trabajo. Así surgió Sorbos, que hoy tiene un portafolio de productos y servicios en cuatro líneas.

  • Talleres y Consultorías profesionales para cafeterías y emprendimientos, dirigida por Elena, de 29 años.
  • Mantenimiento de equipos y maquinaria, a cargo de Johnny, de 29 años.
  • Mandiles y Accesorios, bajo la dirección de Cristina Yacchirema, de 20 años y
  • Eventos con Gabriela Astudillo, de 36 años.

“Al inicio era solo yo. Sin embargo, hoy somos cuatro personas en Sorbos y tienen formación como baristas. Hemos logrado promover el conocimiento sobre este arte en Cuenca, hemos tenido acogida porque cada vez más las cafeterías, restaurantes o los amantes del café quieren acompañar sus postres con esta bebida”, cuenta Elena.

Profesión y arte

El barismo ha ganado prestigio en la industria. En esta rama se aprende todo sobre el café de manera profesional. Es un arte preparar esta bebida con técnica, con herramientas y accesorios, con las mejores moliendas y con marcas seleccionadas a fin de lograr una bebida balanceada, con cuerpo y excelente aroma y sabor.

El barista es la persona que emplea los conocimientos sobre el café y maneja los insumos como los distintos tipos de leche y esencias, entre otros, en lo que se conoce como un café de especialidad. La bebida puede incluir “art latte”, como se le llama a la habilidad de hacer diferentes figuras sobre un espresso, usando la espuma de la leche.

«Art latte” sobre un espresso. XCA

«El barista juega un papel importante en el proceso de calidad del café en la taza».

Elena Tepán, barista propietaria de Sorbos.

Los accesorios son una parte esencial en el barismo. “Las balanzas permiten las medidas justas para lograr un buen café. Cada artículo tiene su función, cada herramienta se usa en los talleres y las capacitaciones. Por ejemplo, el tamaño de la molienda es una herramienta fundamental que puede afectar el sabor del café de formas complejas”, comenta Cristina.

El reto

Gabriela subraya que el reto más grande en este negocio es “lidiar con un servicio que no se ve” y que se califica al final.

“Este servicio es un plus en las celebraciones como bodas y eventos corporativos. Los invitados nos piden las bebidas que van desde americanos, espressos, capuccinos y mocaccinos hasta aguas aromáticas, para quien no consume café”, explica.

Los precios oscilan de acuerdo con el tipo de evento, el número de personas y el tiempo de servicio. Los paquetes van desde 300 dólares por dos o tres horas.

Asimismo, los talleres personalizados que se dictan desde Sorbos van desde los 140 dólares. Las asesorías tienen un costo desde los 700 dólares por un mes, con una guía que incluye desde compra de máquinas hasta abrir la cafetería, gestionar el menú, las bebidas, los precios y se efectúa un seguimiento a cada emprendimiento.

Fuente de empleo

La empresa de Elene genera empleo directo e indirecto con proveedores y con la línea de mandiles y accesorios.

Hasta el momento han capacitado a unas 300 personas y han efectuado asistencias en el Instituto Sudamericano. Han asesorado a 50 marcas de cafeterías y emprendimientos en todo el Austro.

La acogida que ha tenido Sorbos llevó a la empresa a inaugurar, en septiembre de 2022, un local ubicado en la Simón Bolívar y Bartolomé Serrano. Tras la pandemia se han reactivado y para este 2023, la meta es posicionar la marca en todas las líneas, sobre todo, en Eventos.

“Queremos generar aún más formación en Cuenca en la cultura de café. Estamos aún un poco atrás de ciudades como Quito o Guayaquil. Sin embargo, apuntamos a expandir este arte en Cuenca y crecer como una cafetería de especialidad”, asegura Johnny Campoverde.

Sorbos factura hoy unos 2.000 dólares mensuales, lejos de los 200 dólares que facturaba en sus inicios. (PNH)-(I)

DATO

La marca está en redes sociales como Tiktok, Facebook e Instagram como Sorbos Coffee Cuenca.

“El reto más grande en este negocio es lidiar con un servicio que no se ve y que se califica al final”.

Gabriela Astudillo. Encargada de la línea de Eventos.

Patricia Naula Herembás

Licenciada en Comunicación Social con experiencia en medios tradicionales y digitales. Hace coberturas y en redacción de temáticas de emprendimiento, empresarial, sociedad e interculturalidad.

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