La Fiscalía General del Estado informó este martes 31 de enero de 2023 que ha localizado en Estados Unidos a César Leopoldo C. V., requerido por la Justicia ecuatoriana por el presunto feminicidio de su cónyuge Ivis B., perpetrado en mayo de 2019.
En su cuenta de Twitter, la Fiscalía detalló que «César Leopoldo C. V. -quien presuntamente usaba documentos falsos y fue detenido por una infracción de tránsito en Estados Unidos se encuentra llamado a juicio desde agosto de 2021″.
Indicó que se realizan las gestiones respectivas para ponerlo a órdenes de las autoridades competentes.
En abril de 2021, la Fiscalía presentó cargos penales en contra de César Leopoldo C.V., como presunto autor del femicidio de su cónyuge, de 35 años, cuya muerte intentó pasar como un suicidio.
Investigaciones
Según la denuncia de la hermana de la víctima, César Leopoldo C. V. fue la última persona en ver con vida a Ivis.
El 14 de mayo de 2019, el sospechoso, supuestamente, la encontró muerta en el domicilio y pidió ayuda, y luego contó que ella se suicidó ahorcándose con una soga instalada en la sala, indicó la Fiscalía.
La mañana de ese día, después de que los dos hijos de la pareja salieran a sus actividades académicas, Ivis se arregló para asistir a un programa del trabajo, según el relato del esposo, quien dijo haberse ido de casa a su lugar de trabajo antes que ella.
Sin embargo, la investigación de la Fiscalía Especializada en Violencia de Género de Pichincha detectó inconsistencias en el relato del procesado: en el cuerpo de la víctima se hallaron huellas de violencia provocadas antes del feminicidio.
También halló señales que el cuerpo de Ivis fue movido del lugar en el que perdió la vida, según el acta de levantamiento del cadáver y las pericias histopatológicas (exámenes microscópicos de tejido celular).
Valoración psicológica
El informe de autopsia indica que la víctima «no presentó características que sugieran un suicidio descarta que su muerte haya sido de tipo accidental, sino más bien se encasillaría dentro de un homicidio».
La valoración psicológica al procesado precisaba que tenía «ideas fijas negativas en relación a la pareja fallecida y que el discurso es culpabilizante a la esposa», además de dependencia al alcohol, agresividad y un «bajo nivel de sinceridad» en lo que relataba.
Personas del entorno laboral afirmaron que el control llegaba al punto de vigilar a su esposa con GPS en el vehículo y llamarla cuando ella desviaba el camino del trabajo a la casa por llevarlas a sus respectivos domicilios antes de llegar al suyo.
Las versiones de la hermana y de la madre de la víctima coincidieron en que César Leopoldo era celoso y agresivo, por lo que Ivis estaba decidida a separarse.
