La violencia sexual en las instituciones educativas de Cuenca sigue afectando la vida y desarrollo de niños y adolescentes. Un ejemplo de ello es el último caso que dio a conocer la Fiscalía del Azuay.
Entre el 5 y 13 de diciembre de 2022, un grupo de padres, cuyos hijos asisten a un establecimiento de educación privado de la ciudad, denunciaron 12 casos de abuso sexual y uno de acoso sexual cometidos, presuntamente, por un psicólogo.
Según Leonardo Amoroso, fiscal provincial del Azuay, los hechos se habrían cometido mientras se desarrollaban “juegos”, entre estos: besos entre estudiantes y besos con el psicólogo que también fungía como docente del instituto privado.
Ante las denuncias, los casos se investigan para recabar las pruebas y sustentar la formulación de cargos.
De su lado, tanto el Consejo Cantonal de Protección de Derechos de Cuenca (CCPDC), como la coordinación de la zona 6 del Ministerio de Educación, conocen de los hechos ocurridos dentro del establecimiento educativo.
Fabián León, secretario ejecutivo del CCPDC, explicó a El Mercurio que una de las Juntas Cantonales de Protección de Derechos, para precautelar la integrad de los niños, dispuso una medida de alejamiento del docente de las aulas.
Mientras que, la coordinación de la zona 6 del Ministerio de Educación, el 20 de diciembre de 2022 activó la ruta de los protocolos que se tienen que seguir ante la denuncia presentada por los padres de familia que, entre varios puntos, está el acompañamiento y apoyo a las víctimas.
Delitos vigentes
Los casos de violencia sexual en establecimientos educativos no son hechos aislados en Cuenca. Solo el año pasado trascendieron por lo menos tres hechos en los que estuvieron involucrados estudiantes y un docente.
En febrero, dos estudiantes golpearon y violentaron sexualmente a un niño de diez años. Mientras que, en ese mismo mes, un docente fue sentenciado seis años y ocho meses de prisión por abusar de una estudiante.
En marzo, ocho adolescentes abusaron de una niña de diez años. Y en mayo, un adolescente de 15 abusó de un niño de 10 años.
En las instituciones educativas de la zona 6, compuesta por Azuay, Cañar y Morona Santiago, la realidad no es distinta.
“A veces tenemos un caso a la semana, a veces varios casos en una semana. Hay veces que no tenemos ninguna situación, como hay semanas que a veces se nos juntan una y otra institución con situaciones diversas”, dijo a El Mercurio Joana Abad, coordinadora del Ministerio de Educación.
Es por ello, enfatizó Abad, que la comunidad educativa, sean los profesores, personal administrativo, estudiantes y padres de familia, conozca las rutas y protocolos que se deben seguir cuando ocurre un acto de violencia y acoso sexual.
Por ejemplo, las instituciones tienen la obligación de elaborar un reporte del hecho de violencia y realizar la denuncia, en máximo 48 horas, en la Fiscalía.
Otra ruta que deben considerar los denunciantes es que pueden acudir a una Junta Cantonal de Protección de Derechos y solicitar medidas cautelares que protejan a los niños, niñas y adolescentes mientras se desarrolla la investigación.
En el caso de Cuenca hay tres juntas disponibles. La primera está ubicada en la avenida Rayoloma, entre la González Suárez y Pumapungo; la segunda está en la avenida 12 de Abril y Unidad Nacional; y la tercera en las calles Rafael María Arízaga y Mariano Cueva. (I)
