La Organización Mundial de la Salud, en el año 2000, instauró el día 5 de febrero de cada año, como el día mundial del cáncer, con el objeto de lograr aumentar la concienciación, así como mejorar el control y sobre todo la prevención de esta difícil enfermedad. El cáncer es una de las causas de mayor mortalidad en el mundo, las estadísticas internacionales refieren que uno de cada 3 varones y 1 de cada 4 mujeres son diagnosticadas de cáncer, a lo largo de su vida. Los expertos señalan como causas actuales para la aparición de esta enfermedad, entre otros factores de riesgo, el envejecimiento, el uso de tabaco, alcohol, la obesidad y el sedentarismo. Se ha demostrado que esta enfermedad también es hereditaria, atribuyéndose factores genéticos hereditarios hasta en un 10 y 15%. Últimamente y gracias al avance de la ciencia y la tecnología, se nota una mejoría en las cifras de supervivencia, hasta en un 53% a los 5 años, pero realizando un diagnóstico y un tratamiento temprano, sobre todo en los tumores de mama y colon; se considera que el cáncer de mama es el más común a nivel global. A pesar de estos progresos, el cáncer es una gran amenaza para la sociedad y la humanidad; actualmente en Europa se le considera como la segunda causa de mortalidad; estudios españoles refieren que en el año 2020, más de 2,5 millones de personas padecieron esta enfermedad, con una mortalidad de más de 1 millón de pacientes. Las tasas más altas de cáncer en América se encuentran en estados Unidos, Canadá, Uruguay, Cuba, Argentina y Puerto Rico. En Ecuador las cifras estadísticas del año 2020, reportan una incidencia (número de casos nuevos diagnosticados cada año) de más 4 millones de pacientes con cáncer, con una mortalidad de 1,4 millones. Como amenaza mundial, el objetivo primordial sería trazar un plan agresivo de lucha contra esta enfermedad, en la que estén involucrados el Estado, con sus estamentos de salud, pacientes, familiares, ONGs, políticos, empresas, etc., para tratar de conseguir el mayor apoyo económico destinado a la investigación, a la concienciación, a la difusión, así como a la consecución de medicamentos oncológicos que demanda esta enfermedad. (O)
DZM
Licenciada en Ciencias de la Información y Comunicación Social con experiencia en coberturas periodísticas, elaboración de suplementos y materiales comunicacionales impresos. Fue directora de diario La Tarde y es editora.
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