La audiencia preparatoria de juicio contra el exteniente de Policía Germán Cáceres, acusado del femicidio de su esposa María Belén Bernal dentro de un recinto policial, se suspendió este miércoles, sin fecha definida de reanudación.
Jesús López, abogado de Elizabeth Otavalo, madre de Bernal, comentó que el juez debe analizar 76 cuerpos, más de 7.600 fojas para formar un criterio con base en los argumentos que han dado los abogados de las partes.
Por ello, el juez suspendió la audiencia «y ha decidido convocarla para una nueva fecha».
El letrado se mostró seguro de que los argumentos presentados por la Fiscalía y la acusación particular «son demasiados fuertes como para que exista un auto de llamamiento a juicio en contra de Germán Cáceres y en contra de Alfonso Camacho», otro oficial al que se le acusa de no haber auxiliado a la víctima.
Los hechos sucedieron en la madrugada del 11 de septiembre de 2022 cuando Bernal fue a visitar a Cáceres en la Escuela Superior de Policía, al norte de Quito, donde este la mató presuntamente en su habitación y después se deshizo del cadáver, que fue hallado diez días más tarde en un cerro cercano al lugar.
El caso despertó gran alarma social al producirse el asesinato dentro de un recinto policial, e incluso Otavalo ha llegado ha calificarlo como un crimen de Estado, mientras que Cáceres se dio a la fuga y permaneció en paradero desconocido hasta finales de diciembre, cuando fue capturado en Colombia.
Tipificación del delito
Édison Burbano, abogado de Cáceres, cree que «la tipificación del delito de femicidio no se puede aplicar esta vez» pues «no existe ninguna relación de poder», uno de los requisitos para el femicidio.
«Sabré respetar la decisión del señor juez, porque todavía nos queda el tribunal, en donde realmente se tiene que resolver tanto la tipificación del delito como la sanción», comentó.
Burbano había anticipado el martes al inicio de la audiencia que pediría que se trate el juicio como un homicidio, pero López aseguró este miércoles que «toda la prueba demuestra» que fue femicidio.
«Ha existido actos de violencia psicológica y física en contra de María Belén Bernal por parte de Germán Cáceres. Esto configura la relación de poder, y está demostrado técnica y científicamente con la pericia de contexto de género que se ha realizado», apuntó.
Además, dijo, hay una historia clínica psiquiátrica donde Bernal, le comentaba a la persona que le trataba, «que era objeto de maltratos por Germán Cáceres».
Asimismo, el profesional llegó «a determinar que existía dependencia emocional de Belén hacia Germán Cáceres», agregó.
El código penal de Ecuador contempla 26 años de cárcel para el delito de femicidio con agravante, como es el caso de Cáceres al tratarse de su esposa y de haber dejado el cadáver a un lugar público, mientras que el homicidio tiene una pena máxima de 13 años de prisión, que puede llegar a 18 si se considera culposo.
Burbano apuntó que Cáceres, quien está en una prisión en la provincia del Guayas, se encuentra en buen estado de salud: «Está bien protegido».
Y señaló que no se ha pensado en la posibilidad de un cambio de cárcel.
¿Responsabilidad por omisión?
López avanzó que si Cáceres y Camacho son llamados a juicio pasarán a la etapa de juzgamiento, y si el juez decide dictar auto de sobreseimiento a favor de alguno de ellos, apelarán porque tienen «la firme convicción de que con los elementos se acredita la responsabilidad por omisión de Alfonso Camacho».
Gladys Terán, abogada del teniente Camacho, indicó que su defendido fue el único policía que reportó la madrugada del 11 de septiembre que había escuchado ruidos en la habitación de Cáceres.
Camacho «hizo lo que tenía que haber hecho en el momento en que escuchó ruidos». «Salió inmediatamente, pero en veinte segundos, ni así fuera un súper policía o superman, podía haber llegado a impedir la lamentable muerte de la doctora Bernal», opinó.
La abogada recordó que la sanción como autor por omisión es de entre 26 años y con agravantes hasta 34 años «por haber descansado, porque era su derecho».