La carioca, el hornado, el motepata, los dulces, la música, los disfrazados, la chica y un sinnúmero de productos no faltaron en el Carnaval que se vivió en las parroquias rurales de Cuenca. Y es que, el considerado feriado más alegre del Ecuador reactivó las pequeñas economías de las zonas periféricas de la ciudad.
Bastó con recorrer las parroquias que optaron por aprovechar los días carnavalesco para observar cómo, cada uno de los puesto que se armaron en los alrededores de las plazas centrales, se movieron.
Sayausí con su música, Nulti con sus tradiciones, Tarqui con su Carnaval de antaño, y San Joaquín con su “Taita” atrajeron a grandes y chicos en el feriado que culmina hoy en Cuenca y en el país.
“Hay que aprovechar cada fiesta, porque es un manera de obtener un ingreso para aquellos que no tenemos un empleo formal. Carnaval es la fiesta más larga, y en los distintos días podemos ir a diferentes lugares para trabajar”, dijo Luis Gutama, vendedores de cariocas.
Luis, desde el Jueves de Compadres y Comadres que se celebró en Cuenca, empezó a trabajar con intensidad. Desde ese día, hasta ayer, recorrió las parroquias rurales, y fue hasta Paute y Gualaceo para vender sus cariocas.
Aunque hubo mucha competencia, Luis pudo vender más de 150 cariocas en los distintos puntos que visitó en este Carnaval.
Reactivación
Las agroproductoras y las comerciantes también aprovecharon para reactivar una economía, cuya recuperación tras la emergencia sanitaria ha sido lenta.
A diferencia del último año, en este 2023 ya hubo más movimiento en las parroquias rurales de Cuenca.
Docenas de turistas, así como los migrantes que retornaron para el feriado, dejaron recursos económicos a través de los distintos productos que se ofertaron, principalmente los relacionados con la gastronomía.
“Yo vendo choclos, porotos, arvejas en la plaza de San Joaquín. Pero ahora estoy vendiendo la chicha, porque la gente busca en estas fechas. Y sí se vende, algo se saca”, dijo Zoila Mejía.
Doña Zoila, así como una veintena más de comerciantes, fueron parte del Taita San Joaquín, que se celebró en los alrededores de la plaza.
Yo vendo choclos, porotos, arvejas en la plaza de San Joaquín. Pero ahora estoy vendiendo la chicha, porque la gente busca en estas fechas. Y sí se vende, algo se saca
Zoila Mejía
Allí, cada comerciante aprovechó para vender los productos que más están relacionados con el Carnaval: dulces, hornado y cariocas.
También hubo personas que estrenaron sus productos en este feriado carnavalesco, como fue el caso de los productores Milton Chacho y Lucinda Brito, oriundos de la parroquia Chaucha.
La pareja llegó hasta la parroquia San Joaquín para comercializar el chocolate y vino que ellos mismo producen en Chaucha.
“Queríamos ver cómo nos va. Es la primera vez que salimos en Carnaval. Quisimos aprovechar para darnos a conocer y vender los productos que elaboramos”, dijo Milton a diario El Mercurio.
Evaluaciones
Se aguarda que el Carnaval de este 2023 haya sido próspero para el sector turístico. Por ahora, de acuerdo a la Cámara de Turismo del Azuay, la ocupación hotelera llegó al 65%, y el 70% de los turistas que llegaron a Cuenca procedieron de Guayas.
El año pasado, según los datos que presentó la corporación municipal, en el feriado del Carnaval, 56.500 turistas visitaron el cantón, mientras que la ocupación hotelera fue del 71%.
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65 por ciento fue el porcentaje que alcanzó la ocupación hotelera hasta el fin de semana de Carnaval.
70 por ciento de turistas que llegaron a Cuenca por el feriado de Carnaval procedieron de la provincia del Guayas. (AWM)-(I)
