Bangalore (India).- Los ministros de Finanzas y bancos centrales del G20 buscan en su primera reunión para este periodo un acuerdo común para procurar el alivio de la deuda, si bien el grupo mantiene diferencias, dijo este sábado la vicepresidenta del Gobierno español y ministra de Economía, Nadia Calviño.
«Las discusiones están en curso y creo que estamos avanzando en la comunicación con miras a garantizar que haya un marco multilateral que brinde claridad y certeza sobre cómo se llevarán a cabo estos procesos de gestión de la deuda», dijo la ministra en una rueda de prensa en la ciudad india de Bangalore, en el marco de la primera reunión de calado bajo la presidencia del G20 de la India.
Empujada por la pandemia del coronavirus y la guerra, la deuda global ha superado los 300 billones de dólares en manos de acreedores públicos y privados, tras el mayor aumento de la deuda en un año, 2020, desde la Segunda Guerra Mundial.
Un acuerdo en materia de deuda busca el desarrollo de fórmulas para manejar la insolvencia y los problemas de liquidez, además de la reforma de los programas de asistencia y rescate económicos apoyada por las instituciones multilaterales que permitan dar ayuda en países al borde del colapso.
Este es el caso de países como Zambia o Sri Lanka, profundamente endeudados, sin capacidad suficiente para mantener el funcionamiento de sus gobiernos, y a la espera de una asistencia financiera que se demora por los problemas de estas naciones para atender a los requerimientos de los organismos multilaterales.
«Hay diferentes puntos de vista alrededor de la mesa sobre cómo abordarlo, pero creo que es justo decir que hay un acuerdo común y un acuerdo compartido sobre la necesidad de incluir el alivio de la deuda como uno de los instrumentos que pueden brindar apoyo a los países más vulnerables», indico.
Los miembros del G20 y organismos como el Banco Mundial y el Fondo Monetario Internacional (FMI) han estado trabajando en mecanismos de reforma que permitan brindar la asistencia necesaria, y esta es una de las prioridades de los ministros de Finanzas del grupo.
«En el transcurso de 2023 ciertamente vamos a estar discutiendo esto en Washington en primavera, y en Marrakech en otoño, con miras a reforzar estas instituciones multilaterales, asegurándonos de que sigan estando adecuadamente financiadas y de que tengamos los instrumentos apropiados para desempeñar el papel que se supone que deben desempeñar para garantizar la estabilidad financiera», dijo Calvino.
El tiempo sin embargo no está del lado de los países con sobreendeudamiento, como el caso de Sri Lanka, que declaró el impago de deuda hace casi un año y tiene problemas para hacer frente a sus gastos básicos pese a una serie de recortes y el racionamiento de recursos a los ciudadanos.
«El tiempo es esencial», reconoció la vicepresidenta, «hay que encontrar una solución lo antes posible para estos países que se encuentran en la situación más frágil». EFE