Los padres de los niños, que presuntamente sufrieron abuso sexual por parte de un profesor en una institución educativa privada de Cuenca, están a la espera de que la Fiscalía del Azuay acelere la investigación y obtenga resultados.
Así lo informó ayer Caupolicán Ochoa, representante legal de las víctimas. El abogado dijo que los actos cometidos por el docente fueron denunciados en los primeros días de diciembre, y que, hasta ahora, aguardan la celeridad del caso.
Hasta el momento, como parte de la investigación, se han hecho allanamientos y entrevistas a gran parte de los padres de los niños.
“Inicialmente, de lo que yo conozco, la denuncia de la escuela fue de 13 personas, y siguen apareciendo más casos. Pero ocurre que, por la sensibilidad del tema, hay algunos padres que se resisten a denunciar porque no quieren exponer a sus criaturas y es un tema sumamente comprensible”, dijo Ochoa.
El abogado, de su lado, representa a nueve personas que siguen en firme con la denuncia contra el docente, quien habría practicado juegos de carácter sexual con niños de tres y cuatro años a finales del año pasado.
Una vez que se conoció el caso, las familias de los infantes denunciaron al profesor, y, ahora, se espera que se recojan todas las evidencias que permitan esclarecer un hecho que ha conmocionado a la comunidad educativa y a la población cuencana. (AWM)-(I)