Canción popular portuguesa, que tiene su origen en las antiguas colonias lusitanas y que se expresan a manera de fanfarrias. Esta manifestación musical nace en el S. XIX, con un sabor melancólico que rescata el conocido “saudade” portugués y se canta en calles y lugares de música, acompañados por la viola, la guitarra portuguesa y una guitarra clásica, con cuerdas de acero. El fado ha sido declarado Patrimonio Cultural de la Humanidad, en 2011.
En la extensión del espacio portugués se mantiene el fado como la música nacional y hay lugares para escucharlos, sobre todo en Lisboa, en el barrio de Aldama y en Porto, en donde, en las tardes lusitanas, se escuchan los acordes de los instrumentos que convocan a los amantes de este género musical. En muchos de estos sitios se ofrece una copa de Porto, convertido en licor nacional, producto de la mezcla de aguardiente y vino, durante el proceso de fermentación.
Portugal registra su historia en la Baja Edad Media, cuando amplía sus territorios en la era de los descubrimientos, hasta crear un vasto imperio entre los siglos XV y XVI, antigua monarquía que concluyó en 1910, luego de la regencia de 34 monarcas. Su perspectiva cultural es amplia, recogida en teatros, salas de fado y bibliotecas. (O)