En la actualidad, el rol de una madre se ha transformado debido a la inclusión de la mujer al mundo laboral. Es aquí, donde nace nuevas oportunidades para liderar y direccionar un nuevo camino en busca de la satisfacción personal y profesional
Pensando en algunos desafíos que las madres ejecutivas deben afrontar para combinar de la mejor manera estos dos aspectos de su vida. Andrea Valladares, asesora de imagen y CEO de Spondyluss – Agencia de Imagen & Estilo que lleva 6 años asesorando a mujeres líderes en el mundo empresarial, comparte una guía sobre la imagen personal como una herramienta de comunicación única e intransferible.
La experta española, defiende que la imagen personal no es únicamente externa, y para reflejarla de manera precisa desarrolló su propia metodología, donde se requiere de la sinergia entre 4 diferentes áreas. Esta combinación permite que cada persona brille en el ámbito en el que se desempeñe y está dividida en las siguientes dimensiones:
- Interna: desarrollar un diálogo interior que nos motive, nos inspire y nos dé la confianza de qué queremos proyectar.
- Externa: es todo lo que vemos de una persona y el vestuario juega un papel fundamental para la proyección de un mensaje adecuado y profesional.
- Visual: es la unión de la dimensión interna y externa y cómo se refleja ante los demás.
- Comunicacional: todas las habilidades sociales, de diálogo, empatía e inteligencia emocional de la persona.
Una vez que se han identificado cada uno de estos aspectos, el siguiente paso es analizar si lo que llevas puesto o como luces te hace sentir cómoda y transmite tu verdadera personalidad. Para esto, Valladares sugiere:
- Pregúntate: ¿Cuál es la razón por la que me visto así actualmente? ¿Para qué he decidido verme así?
- ¿Cuál es tu estilo preferido? ¿Tus prendas favoritas y por qué te gustan?
- Selecciona tu paleta de colores: determina la calidez o frialdad de tu piel, identifica los que mejor te luzcan según la característica de tus rasgos.
- Usa prendas básicas: aquellas que combinen con todo y son fáciles de acoplar a todo estilo de vestuario.
- Cuida el estado de la ropa: revisa que cada prenda no esté descuidada, con manchas, agujeros o arrugas, ya que causaría una mala impresión.
- Escoge un buen calzado: recuerda que lo llevarás puesto todo el día y es vital que elijas el adecuado para que te sientas cómoda.
- Añade accesorios de tu gusto y que vayan con tu personalidad: aquí es muy acertada la frase “menos es más”, por lo que se recomienda evitar el usar demasiadas joyas al mismo tiempo, es mejor elegir uno que destaque.
Toda persona tiene una imagen que la refleja, y esa representación puede transmitir todo lo que se desea si se gestiona y diseña de manera estratégica. Estas recomendaciones y sobre todo mantener la metodología de las cuatro dimensiones de la imagen, ayudará a toda mujer a transmitir y combinar sus dos mundos: el maternal y el laboral.