La Unión Europea (UE) celebrará posiblemente a finales de este año un diálogo sobre derechos humanos con Cuba, avanzó este jueves en La Habana su alto representante para los Asuntos Exteriores, Josep Borrell.
Borrell hizo estas declaraciones en su primer acto público en La Habana, en donde se encuentra de visita desde este miércoles y hasta el sábado para un encuentro bilateral enmarcado en Acuerdo de Diálogo Político y Cooperación (ADPC) entre la UE y Cuba.
«Celebraremos pronto un diálogo sobre derechos humanos, espero poderlo hacer antes de fin de año», aseguró en un acto sobre micro, pequeñas y medianas empresas (mipymes) cubanas, un actor económico legal en la isla desde septiembre de 2021.
El alto representante de la UE subrayó que el «deseo» del bloque es «acompañar a Cuba en su proceso de apertura, de reformas económicas y sociales, desde una relación de respeto mutuo, para cooperar en la mejora de la vida de todos los cubanos».
En este contexto enmarcó ese diálogo sobre derechos humanos y el consejo conjunto que le ha llevado en esta ocasión a La Habana, todo el objetivo de fortalecer las relaciones bilaterales, «incluyendo por supuesto los derechos políticos, el comercio, las políticas sectoriales, (y) la modernización de la economía».
UCRANIA
En clave de política exterior y sin citar expresamente el apoyo político de La Habana a Moscú en la invasión de Ucrania, el alto representante alertó que el mundo se encuentra «en los albores de otra confrontación mundial» y aseguró que la UE no desea «otra guerra fría«.
«Queremos un país libre, soberano e independiente», dijo Borrell sobre Ucrania, y agregó que el bloque comunitario desea que este país mantenga su integridad territorial y soberanía nacional.
También dijo que Ucrania fue agredida «sin ninguna razón», algo que ha desestabilizado las economías de todo el mundo, y se refirió a la grave crisis que sufre Cuba, una «situación especialmente difícil».
Los momentos clave de la agenda de Borrell en Cuba son el tercer el consejo conjunto UE-Cuba, que se celebra este viernes, y su reunión con el canciller cubano, Bruno Rodríguez.
La visita ha estado precedida por los pedidos de varias ONG, entre ellas Amnistía Internacional (AI) y Human Rights Watch (HRW), que exigieron a Borrell que los derechos humanos sigan siendo una prioridad en la política de la UE hacia Cuba.
Su principal demanda está ligada a la represión de las protestas antigubernamentales del 11 de julo de 2021, en general pacíficas y espontáneas. Varios miles de personas fueron detenidas y unas 700 de ellas han sido sentenciadas hasta el momento, en algunos casos con hasta 30 años de cárcel.
El ADPC UE-Cuba se firmó en diciembre de 2016 y está en vigor de forma provisional desde el 1 de noviembre de 2017 (porque el parlamento lituano lo rechazó).
Este acuerdo supuso el fin de la llamada «posición común» de la UE hacia Cuba, la restrictiva política unilateral que la Unión mantenía hacia La Habana desde 1996, y que vinculaba todo avance en la relación bilateral a los progresos en democratización y derechos humanos en la isla.
El pacto promueve la cooperación en favor del desarrollo sostenible, la democracia y los derechos humanos, así como la posibilidad de encontrar soluciones compartidas a retos globales por medio de acciones conjuntas en foros multilaterales.
Las áreas de interés común que se pueden abordar en el acuerdo incluyen las energías renovables, el desarrollo rural, el medioambiente, los derechos humanos, la buena gestión, la seguridad o la creación de empleo, entre otras. EFE