La Paz.- El presidente boliviano, Luis Arce, se reunió este sábado con sus ministros y legisladores para coordinar su gestión mientras que el exmandatario Evo Morales hizo lo mismo con sus seguidores entre críticas al Gobierno, lo que manifiesta la aguda división en el gobernante Movimiento al Socialismo (MAS).
Arce encabezó un encuentro, que se desarrolló por varias horas en La Paz, con la presencia de sus ministros, viceministros y parlamentarios que conforman el ala «arcista» del MAS como el presidente de la Cámara de Diputados, Jerges Mercado.
Al finalizar, la ministra de la Presidencia, María Nela Prada, leyó las conclusiones de la reunión que tocó temas de gestión, comunicación, denuncias de corrupción y narcotráfico además de «reafirmación ideológica».
«Ratificamos nuestra militancia» en el MAS junto a «nuestros principios ideológicos revolucionarios, antiimperialistas, anticapitalistas, anticoloniales y antipatriarcales» con la «unidad» del movimiento popular», dijo la ministra.
El pronunciamiento rechazó «contundentemente» todo intento «interno y externo de desestabilización» e indicó que «el enemigo principal» no está en las filas del MAS sino que es la «derecha fascista».
Esta semana, la dirección nacional del MAS afirmó que Arce «traicionó» al partido oficialista y señaló al jefe de Estado como el «peor enemigo» del líder de la organización política, Evo Morales, además de acusarlo de buscar su reelección al margen del MAS.
Asimismo, el MAS insistió en las críticas hacia algunos ministros a quienes se señala por encubrir hechos de corrupción y narcotráfico.
Justamente, la reunión de Arce con sus colaboradores se ratificó una «inclaudicable lucha frontal contra todo hecho corrupción y narcotráfico» y que esto se hará «caiga quien caiga».
«No permitiremos que, con afanes políticos, se nos pretenda etiquetar a todos como culpables por delitos que son personales», dictó el manifiesto de la reunión que leyó la ministra Prada.
Por su parte, Morales se reunió con las federaciones de productores de hojas de coca del trópico de Cochabamba, su principal bastión político, y lo acompañaron varios parlamentarios «evistas» como el presidente del Senado, Andrónico Rodríguez.
En declaraciones a los medios, el senador «evista» Leonardo Loza indicó que hubo «muchas observaciones al Gobierno» como la petición del cambio de los ministros de Justicia, Iván Lima, de Gobierno, Eduardo del Castillo y de Obras Públicas, Édgar Montaño.
Loza remarcó que «el siguiente candidato del MAS (para las elecciones de 2025) es Evo Morales y que los «renovadores» o «arcistas» son «sinónimo de la derecha».
La próxima semana, la cúpula del MAS tiene previstas al menos dos reuniones, una con dirigentes nacionales, departamentales y sindicales mientras que otra será con sus diputados y senadores.
Las tensiones en el MAS comenzaron a sentirse a fines de 2021, cuando los «evistas» recomendaron a Arce hacer cambios entre sus colaboradores, algo que el presidente no hizo.
A esto siguieron las reiteradas denuncias de los «evistas» por hechos de supuesta corrupción en el Gobierno y declaraciones de traición contra Arce y el vicepresidente del país, David Choquehuanca. EFE