Peter Singer: Está justificado que tengamos cierto miedo a la inteligencia artificial

El filósofo australiano Peter Singer-en la imagen- Premio BBVA Fronteras del Conocimiento en Humanidades, habla en une entrevista con EFE sobre su trabajo académico en el ámbito de la racionalidad y el progreso moral. EFE

El filósofo australiano Peter Singer cree que «está justificado» que haya «cierto miedo» a la inteligencia artificial y es importante que se controle de alguna manera, aunque para este catedrático de Bioética el desafío ético más urgente al que nos enfrentamos es el cambio climático.

Singer ha logrado este año el Premio BBVA Fronteras del Conocimiento en Humanidades en España junto al psicólogo experimental canadiense Steven Pinker.

El filósofo australiano (Melbourne, 1946) ha marcado un punto de inflexión al extender y fundamentar la ética aplicándola al dominio de los animales, con notables consecuencias para la legislación internacional sobre el bienestar animal.

Inspirador de los movimientos en favor del bienestar animal con su obra “Liberación Animal” (1975), Singer explica EFE que no es que haya que dar el mismo peso al sufrimiento animal que al humano, sino que estos «deben recibir la misma consideración en cuanto a sus intereses». «No debemos pensar que nosotros como especie somos más importantes que las demás», abunda.

PREGUNTA: Casi después de 50 años de “Liberación Animal” ¿está satisfecho con los avances logrados en la defensa del bienestar de los animales?

RESPUESTA: No estoy satisfecho, tendría que haberse hecho mucho más, pero estoy contento de que haya un movimiento en favor de los derechos de los animales y de haya habido avances y cambios en las leyes, aunque hay mucho por hacer.

P: ¿Es difícil que la gente sea consciente de que los animales también sufren, especialmente con algunas formas de crianza, o es que no nos importa?

R: Hay varias razones. Una es que durante miles de años hemos tenido una ideología que dice que tenemos un dominio sobre los animales y que los podemos utilizar a nuestra conveniencia. Así, hemos desarrollo formas de usar a los animales a través de macrogranjas, para experimentación. Es difícil hacer cambios en cosas que están tan sumamente imbricadas en nuestra cultura.

P: ¿Cuál es el desafío, desde el punto de vista ético, más urgente que tiene la humanidad?

R: El cambio climático, probablemente, se está convirtiendo en una cuestión cada vez más urgente. El clima está cambiando en todo el planeta y aún así seguimos emitiendo gases de efecto invernadero a la atmósfera.

P: ¿Parece que no nos damos cuenta de lo peligroso que es?

R: Sí, pero el clima se impone ante nosotros, no podemos evitar que nos afecte. Yo soy australiano y no podemos obviar los incendios forestales. Estamos teniendo fenómenos climatológicos sin precedentes.

P: En su pensamiento habla de la importancia del razonamiento para cambiar el modo de actuar y que es más importante que el impulso emocional. Si miramos a nuestro mundo ¿andamos un poco faltos de razonamiento?

R: Lamentablemente, los seres humanos no siempre actúan en base al razonamiento, se puede ver en muchas dimensiones: respecto a la guerra, el cambio climático y muchas creencias religiosas, pero eso no significa que el razonamiento no haya avanzado si nos fijamos en largos periodos de la historia.

Ahora usamos el razonamiento mejor, hay más gente que aborda la vida de forma racional para solventar los problemas de la Tierra, aunque, por supuesto, hay personas que no actúan racionalmente o que no adoptan un punto de vista universal.

Es importante que reconozcamos que somos un único mundo y que el cambio climático y otras cosas nos afectan a todos. Esa es la dificultad, no solo hay que ser racional, sino también tener una perspectiva suficientemente universal.

P: ¿Cree que podemos llegar a tener esa perspectiva universal?

R: Hay que intentar ser optimistas, porque si no tiramos la toalla, y tener esa perspectiva, sobre todo en cuanto al cambio climático, que es el que nos está obligando a pensar que todos vivimos en el mismo mundo.

Creo que mucha gente se da cuenta de ello y que llegará un momento en que todos los líderes de los países del mundo se den cuenta.

P: La inteligencia artificial está en el centro de un debate. Hay quien pide que se pause la investigación unos meses y que se regule. ¿Hay que tener miedo de ella?

R: Está justificado que tengamos cierto miedo con respecto a la inteligencia artificial y lo que pueda acabar haciendo, pero también es importante que la observemos, que la regulemos o la controlemos en cierta manera.

Creo que va a ser muy difícil que se pause para pensar en cómo se va a desarrollar, va a ser muy difícil que haya un acuerdo global sobre esto.

Además, es mucho más difícil observar esto que el desarrollo de armas nucleares, es muy difícil vigilar si alguien está desarrollando inteligencia artificial o no; por tanto, tenemos que fiarnos del sentido común.

No queremos que la inteligencia artificial se nos escape de control y que nos dañe de forma grave, por lo que creo que está muy bien que exista este debate, que la gente sea más consciente de la necesidad de plantearse esto, pero no sé cómo vamos a poder llegar a un acuerdo común.

P: ¿Existe la posibilidad de que la inteligencia artificial se nos vaya de las manos? ¿Quién debería hacer su supervisión, un órgano internacional?

R: Hay que admitir que hay posibilidades de que se escape de control, no podemos decir a ciencia cierta que nunca se va a escapar de nuestras manos. Creo que tenemos que dedicar tiempo a hablar de ello, a trazar formas de control en las que podamos estar de acuerdo, pero no soy demasiado experto como para abundar demasiado en el tema.

P: Quizás en un futuro llegue la superinteligencia artificial, ¿debería tener valores éticos?

P: Sí llegáramos a desarrollarla tendría que tener en cuenta los intereses de todos los seres sintientes, no solo de los seres humanos. Estos serían los principios fundamentales en los que debería basarse la inteligencia artificial.

P: Como filósofo y profesor de ética, ¿cuál es la influencia de esta disciplina en la vida de la gente?

R: Sin duda, la filosofía y la ética tienen una influencia en nuestra vida. Recibo cientos de correos electrónicos de personas cuya vida ha cambiado gracias a mi trabajo, mis enseñanzas o por la lectura de mi trabajo. No se puede subestimar el poder de la ética para cambiar la vida de las personas. EFE