En medio del ajetreo por el cierre del año lectivo, los profesores también empiezan a prepararse para el nuevo modelo educativo. Una de las modificaciones que se aplicará a partir del 22 de agosto será el tipo de evaluaciones, de acuerdo con el Reglamento General a la Ley Orgánica de Educación Intercultural, expedido el 19 de febrero pasado.
El nuevo sistema de calificaciones contemplará el promedio de todos los insumos que el docente genere a lo largo del periodo académico. Es decir, lecciones y participación en actividades, trabajos en clase y grupales. Salvo la evaluación sumativa y diagnóstica, que consisten en las pruebas y los exámenes.
Andrés Bonilla, coordinador subrogante de la Zonal 6 del Ministerio de Educación, indicó que también se vuelve a la evaluación trimestral, es decir son las evaluaciones que se realizan al finalizar cada periodo. Estas considerarán la teoría y la puesta en práctica de los conocimientos adquiridos en clase. Al cierre del año lectivo, el estudiante también deberá presentar el desarrollo de un proyecto final, que ayudará a evaluar las destrezas y conocimientos básicos puestos en práctica.
Cada nivel de educación: inicial, general básica y bachillerato tendrá su esquema de evaluación.
Alexandra Flores, madre de familia, reconoce que todo cambio implica cierta dificultad, pero tiene claro que deben apoyar el mejoramiento escolar de sus hijos. Además de esta forma fue educada ella, por trimestre, según comentó.
Flores espera que las evaluaciones no sean un mecanismo de estrés para los chicos, sino una herramienta para realizar un refuerzo de aprendizajes.
Las modificaciones
Realizar evaluaciones más continuas y determinar a tiempo los refuerzos que necesitan los alumnos será el reto para los docentes. Luego de once años se retomará este sistema y para ello los maestros ya se encuentran en capacitación.
Esto permitirá a los padres de familia darse cuenta hacia dónde se encaminan sus hijos con respecto a las calificaciones. Así lo indicó Janeth Bustamante, docente de la Unidad Educativa Miguel Moreno, quien en estos días, junto con otros profesores, se encuentra analizando y alistando los procesos que van a aplicar el nuevo año lectivo.
Para implementar este cambio de los trimestres y ya no quimestres, el Ministerio de Educación emitió la normativa para regular las evaluaciones, permanencia y promoción en el sistema fiscal en todos los niveles, subniveles y modalidades.
Cecilia Delgado, docente de la Unidad Educativa Especial Agustín Cueva Tamariz, señaló que, con las evaluaciones quimestrales, los estudiantes han tenido demasiadas ventajas. “Aún así los padres de familia hasta reclamaban por la pérdida de año de sus hijos. Pero no se daban cuenta que con este sistema los estudiantes no asumían mucha responsabilidad directa sobre su estudio por todas las oportunidades que tenían”.
No obstante, la educadora consideró que es necesario entender que el aprendizaje no es la calificación, sino los logros y desempeños auténticos que logran los chicos de acuerdo a su edad.
Patricio Astudillo exsupervisor de educación, indicó que no le ve mucha relevancia en la división del periodo escolar, sino que más bien habrá eficiencia en la planificación que tiene que hacer el maestro. “La calidad de la educación no está en la forma de dividir el año lectivo, sino en el modelo educativo a seguir. El paradigma que deben conocer los maestros al pie de la letra para poder obtener lo mejor de sus estudiantes que es el rendimiento escolar”.
En el nuevo modelo ya no se contemplarán los exámenes remediales ni de gracia, considerados como una tercera y cuarta oportunidad después de los supletorios a quienes no habían superado la nota mínima de siete puntos para pasar de año.
Ximena Arévalo, también docente, explicó que es una oportunidad para que el profesor se autoevalúe en su desempeño, e incluso pueda mejorar los procesos metodológicos para que los aprendizajes de los alumnos sean significativos y no solo memorísticos. (SAM) (I)