El Tour de Francia extremará los elementos de seguridad para proteger al pelotón, recientemente afectado por el fallecimiento del suizo Gino Mader el pasado día 16 de junio de 2023 durante la Vuelta a Suiza y, como gran novedad, instalará colchones en algunos descensos peligrosos para reducir los riesgos.
Así lo detallaron el patrón del Tour, Christian Prudhomme, y el de la Unión Ciclista Internacional (UCI), David Lappartient, que esán al frente de una nueva entidad de seguridad junto a representantes de equipos y de corredores.
Se trata del programa SafeR, que pretende introducir elementos nuevos para evitar accidentes como el que costó la vida a Mader, un corredor de 26 años al que se le rendirá homenaje.
«Cada vez vemos más accidentes y peligros. Venimos trabajando en esto desde hace meses, incluso años. Cada vez hay más obstáculos para ciclistas que cada vez van más rápido», indicó Lappartient.
Prudhomme aseguró que la seguridad depende de tres factores, «el recorrido, el comportamiento de los corredores y el material, que hace que se incremente cada vez más la velocidad».
Sabedores de que el riesgo cero no existe, el patrón del Tour apeló a incidir en los tres para evitar el máximo posible de accidentes graves.
«El ciclismo es un deporte magnífico pero cruel», señaló el director del Tour, quien citando un estudio de la Universidad de Ganz, aseguró que el 60 % de las caídas tienen lugar en los últimos 40 kilómetros de las etapas y el 40 % en los últimos 20.
«Eso responde al nerviosismo que se genera en el tramo final ligado a la legítima voluntad de los corredores de ganar la etapa», indicó Prudhomme.
Entre las mejoras del recorrido, apuntó la colocación de colchones en ciertos lugares del descenso del col de la Loze en la etapa 17 para evitar que si los ciclistas se caen vayan por barrancos o se estrellen contra ciertas rocas.
También mencionó mejoras en la carretera de descenso del col de la Jouox Plane, en la etapa 14.
Prudhomme también indicó que el Tour rendirá homenaje al suizo fallecido hace dos semanas.
«No se puede morir con 26 años. Mader soñaba con correr el Tour y debería estar aquí. Queríamos recordarle y le propusimos a la familia que su equipo no tenga dorsal 61″, dijo el patrón de la carrera. Por eso, el español Mikel Landa, jefe de filas del Bahrain, llevará el 62.
El patrón del Tour se refirió también a la difícil situación que se vive en Francia con los disturbios provocados tras la muerte de un joven en la periferia de París a manos de un policía.
Aunque por ahora el Tour se desarrolla en España, el próximo lunes llegará a territorio francés, en una etapa que comenzará en Amorebieta y acabará en Bayona.
«Estamos en contacto constante con los servicios del Estado, como cada año, y seguimos la situación, que evoluciona cada día», dijo Prudhomme, que consideró que pese al excepcional despliegue policial para combatir esos disturbios, la seguridad en el Tour es la prioridad.
Unos 28.000 gendarmes, policías y bomberos son desplegados para garantizar la carrera. EFE