El 15 de julio por la noche, se desató una balacera en las instalaciones de la Unidad de Flagrancia de la Fiscalía en Quito. Según informó la Policía la mañana siguiente, el ataque tenía como objetivo cinco detenidos retenidos en ese lugar.
Tres personas en moto realizaron disparos y lanzaron un artefacto explosivo, pero afortunadamente, el intento resultó fallido.
Los detenidos en la Unidad de Flagrancia enfrentaban cargos por tenencia y porte ilegal de armas de fuego. Tras el incidente, la Policía Nacional acordonó el área y evacuó temporalmente el edificio.
Los atacantes fueron detenidos y se encuentran en proceso de formulación de cargos, dentro de la misma Unidad de Flagrancia.
Una adolescente de 14 años resultó herida por el roce de una bala durante el ataque y está siendo atendida.
Además, una granada abandonada en el lugar fue controladamente detonada por el equipo antiexplosivos del Grupo de Intervención y Rescate.
El Consejo Nacional de la Judicatura condenó enérgicamente este acto violento.
Durante la noche del 15 de julio, se realizaron cierres viales en las avenidas Patria y Amazonas, así como en la calle 9 de Octubre. Sin embargo, para el 16 de julio, las vías ya fueron habilitadas nuevamente.
